Descripción de la Exposición
Ellos, con su porte elegante, las finas comisuras de los labios salivando ante semejante banquete. Todo exquisitamente dispuesto, listo para encandilar a cualquiera que se lo cruce en su apresurado camino. Un breve momento de deleite descontextualizado de lo atroz que puede ser llevar cada ingrediente hasta su mesa. El derecho impostor de creerse por encima del límite. Borrachera de ego. Los ojos que no ven y la conciencia que no pesa.
Chuparse los dedos y no dejar nada. Pero nada de nada.