Descripción de la Exposición
La muestra, organizada por la Fundación Unicaja y que cuenta con la colaboración de la Diputación de Sevilla, reúne por primera vez medio centenar de obras, pertenecientes a la Colección de Arte Unicaja, de los más destacados artistas almerienses vinculados a la corriente intelectual y pictórica indaliana. En concreto, destacan piezas de Jesús de Perceval, protagonista indiscutible de este grupo; Miguel Cantón Checa; Francisco Alcaraz; Luis Cañadas, y Antonio López Díaz.
La muestra, que llega a Sevilla tras pasar por los Centros Unicaja de Cultura (CUC) de Almería y Cádiz, está compuesta por piezas de relevante calidad, que reflejan el alcance y la versatilidad que lo indaliano ha supuesto para la plástica contemporánea. Obras que se exponen de cara a su estudio, contemplación y disfrute por parte de la sociedad.
El visitante podrá disfrutar de las creaciones de estos cinco artistas estrechamente relacionados con esta corriente intelectual y pictórica, los cuales en 1947 bautizaron el Indalo, considerado actualmente símbolo de la provincia almeriense; concretamente, durante el I Congreso Indaliano que tuvo lugar en Pechina (Almería). Además, colaboraron en la célebre exposición colectiva celebrada ese mismo año en el Museo de Arte Moderno de Madrid.
Jesús de Perceval, figura del arte español de mediados del siglo XX
El protagonismo de Perceval (Almería, 1915-1985) dentro de este grupo es indiscutible; de hecho, la mayor parte de los estudios de investigación existentes al respecto admiten que lo indaliano nace y muere con su creador. Una notoriedad que, paralela a la calidad de su producción pictórica, le permitió convertirse en una de las personalidades más destacadas del panorama artístico español a mediados del siglo XX.
Este pintor y escultor, Hijo Predilecto de la Ciudad de Almería, practicó no pocos registros artísticos, a veces de forma simultánea, desde su etapa más sombría y expresionista de los años 30, que combinó en ocasiones con las enseñanzas postcubistas, pasando por la influencia de la pintura renacentista italiana en los años 40 o su fase colorista de la década de los 50 a raíz de su amistad con Rafael Zabaleta.
En los años 60 y 70 se encuentran contribuciones sobresalientes en su producción a través de una pintura metafísica, no lejana al surrealismo. Una obra tan enigmática como protagonista de esta exposición, titulada 'Hasta que se aniquile el que no existió y subsista el que no dejó de existir', datada en 1965, es buen ejemplo de esa época. No menos misteriosa, a pesar de su evidente temática religiosa, es 'Asunción' (1960).
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España