Descripción de la Exposición El tiempo pasa, cobra su tributo, se esfuma, y nosotros envejecemos, nos doblegamos a ese implecable compañero de nuestras vidas que a veces nos impacienta con su lentitud y casi siempre nos castiga con su rapidez.
Asomarse a la ventana y disfrutar del paisaje, de la historia, de la brisa del mar, de la explotación de sugerencias que nos ofrece la contemplación del paisaje urbano reflejado en ese espejo salino difuminado por el devenir de los botes amarrados al muelle, es como pasar las horas muertas.
Detenerse en el más mínimo detalle, saborear el momento más insignificante, la conversación más superficial o la más profunda, una mirada, un gesto, una expresión, una lágrima o un llanto desesperado. Recrearnos en lo trivial, lo cotidiano, lo de todos los días, lo que hemos comido o bebido, el tallo de la planta silvestre que crece en esa esquina o el vaso que hay sobre el aparador, es vivir las horas muertas.
Mª José Contador nos ha regalado unos trabajos ejemplares donde el color, el dibujo, la composición magistralmente elaborada y la utilización de formas arquitectónicas que caracterizan la esencia de esta ciudad, resultan objetos de su trabajo y convierten lo trivial y lo cotidiano en lo trascendental de la obra.
Por eso, a veces, lo mejor es detenerse, dejar el tiempo que haga su trabajo y contemplar nuestro entorno y a nosotros mismos, para entender lo que somos y lo que somos capaces de ser, lo que vemos y lo que somos capaces de ver, lo que hacemos y los que somos capaces de hacer Entender el Mundo en el transcurso de las horas muertas.
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España