Descripción de la Exposición
José Hidalgo-Anastacio es un artista ecuatoriano que ha venido desarrollando una ascendente carrera en el escenario artístico, fue ganador del Premio Arcos Dorados en la edición 2014 de ArteBA, Buenos Aires y en menos de 4 años ha realizado 4 exposiciones individuales en su país y el extranjero.
El desarrollo de la obra de Hidalgo-Anastacio articula el dibujo, como lugar de enunciación; un cuestionamiento por el sentido vivencial de la imagen; y un interés por relacionarse con derroteros y sentidos del arte abstracto y formal, moderno y contemporáneo. Le interesa trabajar obras que exijan su presencia a través de una reflexión de la constitución físico-formal de las mismas.
Para esta muestra, Hidalgo-Anastacio explica que todo viene de las cuatro esquinas del mundo y todo puede fugar hacia ellas, el mundo es un cuadrado reticulado. El cuadrado y la retícula han sido elementos recurrentes en el acto de medir la espacialidad, de aprehender y dominar el espacio, de consumirlo y hacerlo asimilable. Estas formas han tenido un ancestral carácter ritual-racional dentro de la concepción del espacio; luego, la pintura hizo del cuadrilátero su estructura favorita para ser desplegada
El cuadrado es una forma ideal, es un imposible en nuestro universo tridimensional, pero es tangible desde su uso instrumental: Desde la praxis histórica de las agrimensuras (cada una con sus diversos niveles de complejidad) por parte todas las culturas sedentarias, hasta la constitución de la retícula y el mapa como las piedras angulares de la representación bidimensional del mundo; herramientas que -aún hoy- mediante proyecciones matemático-trigonométricas traducen nuestro esférico planeta en un mundo de cuatro esquinas, apto para ser navegado, dominado, cuantificado, ritualizado, re-significado... Un mundo donde se vuelve teórica y representacionalmente posible la omnivisión, cosa descartada si queremos dominar con una sola mirada el globo terráqueo en su totalidad.
Todo acontece en las cuatro esquinas del mundo, de forma curiosa también se puede aplicar eso a nuestros mundos (mayoritariamente) más allá de lo macro: en nuestras habitaciones, nuestras aulas de clase, nuestros teatros, nuestras oficinas, nuestros cubos blancos.
La retícula y el cuadrado son modélicos, pero pueden ser trastornados y reinterpretados como estructuras, los espacios cambian si medimos de maneras otras, si la vara con la que lo medimos es otra o es prestada, inclusive si medimos con muchos patrones en simultáneo... Entonces medir aquello que está en las cuatro esquinas puede dejar de ser una tarea-aliciente, y puede ser una operación que arroje más preguntas que respuestas.
Las cuatro esquinas del mundo articulan y plantean propuestas de diferentes núcleos productivos que he venido desarrollando como artista visual; vinculando así, en abierto diálogo nociones de geopolítica e intercambio, geometría, herramientas y discursos científico-históricos, cuestionamientos en torno a la espacialidad, la traducción, y las tradiciones formales del arte y sus dinámicas constructivas.
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España