Descripción de la Exposición La muestra, que reúne más de 100 obras, gira en torno a las largas estancias que el artista ha pasado en los últimos diez años en Brasil y refleja los aspectos más determinantes de su itinerario. Fiel a su larga trayectoria, dominada por una orientación en donde se entrecruzan el arte y la vida cotidiana, Morea manifiesta de nuevo su interés por la mitología y por las leyendas populares tanto primitivas como actuales, en pinturas que basculan en el marco de una poética de sesgo neoexpresionista entre los extremos del pop y el arte povera. Las Américas de Morea, se divide en tres secciones dedicadas a los enclaves de Salvador de Bahía en los que el artista estuvo trabajando y que, tomándolos como referencia, articulan la exposición. La primera sección, Ribeira, reviste el carácter de un primer encuentro, con todo el deslumbramiento que comportó esa estancia. En Uma visao baiana se hace patente el efecto de aquella experiencia necesariamente fascinante. Morea pintaba en aquel momento, en forma de obras emparejadas o en diálogo, retratos, deidades autóctonas (los orixás), figuras humanas en situaciones hedonistas (jugando en la playa, o comiendo, a manera de bodegones animados o naturalezas vivas) junto a vegetaciones exóticas y otras referencias relativamente tópicas, que 'Morea reinterpreta -según precisa Vicente Jarque-, desde su personal perspectiva, con su sesgo particular, dominado por las duplicidades y los dípticos, lo especular y los dobles sentidos, característicamente inspirado por el entorno específico en el que se movía. En la segunda sección, dedicada a la obra realizada en el espacio de una Chácara o granja brasileña, un espacio exuberante y semisalvaje, predominan las figuras de animales y vegetación. Las figuras humanas, en concordancia con el tono general de este período, adoptan formas enigmáticas, y Morea las sitúa frecuentemente detrás de los enrejados o celosías característicos del lugar. En la tercera sección, en donde se incluye la obra realizada en el barrio de Nazaré, ubicado en la empobrecida y emblemática zona del Pelourinho, llamada Ladeira do Desterro, y último estudio de Morea en Salvador, la atmósfera se torna más sombría. Siguen apareciendo retratos y celosías, pero se desvanece el entusiasmo experimentado años atrás en Ribeira, El artista refleja en sus obras un espíritu más meditativo, determinado por el contexto urbano duro y marginal, en el que está situado. La estrategia de Morea -continúa Vicente Jarque- es representar la experiencia humana en todas sus dimensiones, y esto lo hace, además, entendiéndola a manera de un 'continuum' permanentemente interrumpido, como una incesante sucesión de experiencias particulares de distinto signo, y ello sin pararse a respetar demasiado las jerarquías entre lo alto y lo bajo, lo grande y lo ínfimo, lo bello y lo feo, lo sagrado y lo profano. Una actitud que no podía sino encontrar en Bahía, precisamente en Bahía, el terreno más idóneo para fructificar'. 'Asistimos, por tanto -concluye Consuelo Ciscar-, a un recorrido expositivo que nos invita a viajar, a compartir experiencias y a vivir aventuras por tierras brasileñas a través de unos lienzos que se abren como ventanas literarias a la realidad de un continente lleno de matices capturados por la personal mirada del artista'.
Exposición. 31 oct de 2024 - 09 feb de 2025 / Artium - Centro Museo Vasco de Arte Contemporáneo / Vitoria-Gasteiz, Álava, España