Descripción de la Exposición
En este año conmemorativo del centenario de Eduardo Chillida y Néstor Basterretxea, Tabakalera ofrecerá un extenso programa expositivo dedicado a la escultura contemporánea, con el que pretende explorar nuevos enfoques de la disciplina en el ámbito local e internacional. Larruak eta izurrak (Pieles y pliegues), comisariada por Laura Vallés Vílchez, inaugura una serie de tres exposiciones vinculadas con la escultura en la que destaca una nueva generación de artistas, como June Crespo, Nora Aurrekoetxea, Sahatsa Jauregi y Kimia Kamvari, quienes están ya alcanzando repercusión internacional gracias a un lenguaje visual propio característico. Junto a estas artistas locales interactúan con diversos posicionamientos artísticos, las artistas internacionales Yael Davids, Iman Issa y Lúcia Koch.
La exposición presenta una variedad de esculturas, instalaciones y dispositivos que exploran el cuerpo humano, animal y mecánico, buscando recuperar el sentido del tacto y la conexión emocional. Todas ellas destacan por su planteamiento singular sobre la materia y el espacio, así como sobre la relación con el cuerpo y el movimiento, y acercan su práctica escultórica cada vez más a lo performativo. Precisamente esta cercanía al cuerpo y al movimiento ha llevado a las escultoras a explorar nuevas colaboraciones con otras artistas y colectivos de ámbitos como la performance o de las artes escénicas, invitándoles a crear nuevos diálogos con sus piezas.
Artistas participantes
Los materiales utilizados en las obras que conforman la exposición, como el metal, el hormigón, la resina, la lana de oveja y el polvo de sangre, muestran tanto el cuidado como la violencia inherentes a la escultura. Desde la pieza de acero de Sahatsa Jauregi hasta las instalaciones de hormigón de June Crespo, cada obra ofrece una particular visión de la escultura contemporánea.
La artista Nora Aurrekoetxea presenta piezas escultóricas que exploran la relación entre amor y vulnerabilidad. Utilizando un material tan poco común como la lona de hormigón y toallas, su trabajo invita a reflexionar sobre la interdependencia emocional y la protección ante el dolor. Aurrekoetxea despierta en su obra cuestionamientos sobre la naturaleza del amor y la resistencia ante la adversidad.
June Crespo presenta Manual para el uso de Core (2021-2024), formada por una serie de esculturas de hormigón creadas a partir de encofrados de bidones de acero, un vídeo en la que junto con la cineasta Maddi Barber registró todo el proceso, desde la extracción del material hasta su consolidación, y las performances de los cuerpos de Beatriz Setién, Maia Villot y Antonio Menchen que, durante la exposición, transformarán las esculturas en un dispositivo que interactúa con la arquitectura de Tabakalera, y ofrecerán una experiencia pedagógica de transformación.
El trabajo artístico de Kimia Kamvari reflexiona sobre el límite entre la vida y la muerte, y captura momentos que son como póstumos. En Tabakalera, Kamvari presenta imágenes que exploran la relación entre lo humano y lo natural, como el lomo del ganado fusionándose con las laderas del monte, utilizando el celuloide sensible para expresar las urgencias globales de nuestro tiempo.
Lúcia Koch fusiona en su trabajo artístico la fluidez de la memoria con la solidez de la arquitectura. A través de esculturas, instalaciones y fotografías, crea espacios sensibles que reflejan el paso del tiempo. Su obra Sans fin (2022), teñida de rojo sangre fundido en tierra, se despliega en la exposición como un juego efímero suspendido en el tiempo. Koch, como describe la crítica de arte Aurora Fernández Polanco, envuelve su obra en pliegues que implican las condiciones materiales de producción y las formas de vida, ofreciendo una reflexión sobre cómo habitamos el mundo.
Iman Issa desafía las expectativas del espectador con su serie Proxies, with a Life of Their Own (2019-actualidad), donde presenta autorretratos que también son retratos de otras figuras. Issa se preocupa por cómo las obras de arte controlan su contexto y cómo son percibidas, cuestionando la falta de autonomía que se presupone en ellas. Como fotógrafa, busca romper con la idea de que los objetos artísticos necesitan de una explicación para afirmarse y definir su recepción.
Yael Davids, artista de performance, ve el cuerpo como un archivo de historias compartidas y una herramienta para aprender a "no saber". Davids ha trabajado con su familia y el Centro de Acercamiento a lo Rural (CAR) para crear un espacio donde la lana de oveja desechada del proceso de fabricación del queso se convierte en esterillas para acoger sesiones de Feldenkrais. En Tabakalera, con la ayuda de las educadoras somáticas Sirah Badiola y Paula Rodríguez, transformará la sala de exposiciones en una escuela que explora las complejidades del cuerpo y la experiencia humana.
Sahatsa Jauregi presenta una obra de acero que refleja una experiencia compartida con las integrantes de la compañía de artes escénicas Tripak. Junto con Tripak, actualmente formada por Andrea Berbois, Maite Mugerza, Marina Suárez y Natalia Suárez, Jauregi crea una dramaturgia que evoca imágenes de herramientas, plomo, prótesis, armas y guerras. La colaboración entre estas mujeres genera confianza y una narrativa visual única, que se mostrará en tres ocasiones durante la apertura, el eje y la clausura de la exposición.
Programa de actividades
Larruak eta izurrak va más allá de ser una simple muestra, e invita al público a participar activamente en la experiencia artística a través de una serie de intervenciones en vivo y de actividades programadas. En los cuatro meses de apertura de la exposición, sucederán intervenciones por parte de diversos artistas y colectivos: la compañía Tripak, colaborando en la pieza de Sahatsa Jauregi, y Beatriz Setién, Antonio Menchen y Maia Villot con la de June Crespo, intervendrán en vivo en la propia sala, para activar las piezas escultóricas y crear nuevos diálogos. La muestra se completará con el trabajo de la artista Olatz Otalora quien, invitada por la comisaria, realizará la documentación del proceso, y pondrá en relación los proyectos de la exposición con otras iniciativas de apoyo a artistas que ofrece Tabakalera.
Además de las activaciones en vivo, el programa público incluirá una variedad de actividades diseñadas para enriquecer la experiencia de los y las visitantes. Desde sesiones semanales de Feldenkrais en la propia sala de exposiciones, de la mano de las educadoras somáticas Sirah Badiola y Paula Rodríguez, hasta talleres de arte para familias, visitas dialogadas, el curso de arte contemporáneo Arte-makina, un curso dirigido a la comunidad educativa y proyecciones de cine.
Exposición. 17 dic de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Picasso Málaga / Málaga, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España