Descripción de la Exposición La generación de la Ruptura cambió los modos de percepción del arte en México a mediados del siglo XX. Pero antes, cuando culminaba la Revolución Mexicana, el muralismo surgió como un indiscutible movimiento de vanguardia, inédito en toda América, que de manera controversial y con sus propias formalizaciones se vinculó a las tendencias de la modernidad internacional. Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros dirigieron sus elecciones estéticas y temáticas hacia el pasado y el presente de México con una captación innovadora de los problemas sociales y existenciales que surcaban el país entero. Por primera vez, el hombre contemporáneo y la población indígena, lejos de las idealizaciones académicas, tuvieron su decidido lugar en la iconografía local. Después de los 'tres grandes', e impulsados principalmente por Rivera y Siqueiros, algunos artistas formados en torno a la Escuela Mexicana de Pintura continuaron con una temática folklorizante y epigónica, mientras el orbe avanzaba al compás de la experimentación plástica. Contra esas voces se rebeló la actitud valiente y profundamente contestataria de Rufino Tamayo y, siguiéndole de cerca, la de Carlos Mérida y Gunther Gerzso. Ellos, y un poco más tarde Mathias Goeritz, Wolfgang Paalen y Waldemar Sjölander, fueron los modernistas solitarios de México, aquellos autores que dieron la batalla para incorporarnos en el abanico de las propuestas extendidas por las corrientes mundiales del arte. Al despuntar los años 1950, comienza a emerger un grupo que introduce colectivamente lenguajes de avanzada y cuyas obras, marcadas por la heterogeneidad, constituyen una sólida y franca apertura. En ese núcleo originario están Juan Soriano, Vlady, Pedro Coronel, Alberto Gironella, Lilia Carrillo, Manuel Felguérez, Vicente Rojo, Kazuya Sakai, Enrique Echeverría, Roger von Gunten, José Luis Cuevas, Arnaldo Coen, Fernando García Ponce y Gabriel Ramírez. El tiempo ha decantado la concepción de las formas y hoy, en pleno siglo XXI, se ha hecho necesario ampliar ese conjunto de artistas, porque los integrantes de la nueva camada confluyen con las iconizaciones de los anteriores. Es por eso que en esta exposición hemos sumado a Gilberto Aceves Navarro, Tomás Parra, Francisco Toledo, Brian Nissen, Helen Escobedo y Rodolfo Nieto. Todos ellos conforman lo que se ha dado en llamar la Generación de la Ruptura. Más que generación cabría, asignarle el carácter de movimiento. Y vaya que sí lo fue, tanto que su legado llega hasta nuestros días.
Premio. 27 ene de 2025 - 10 mar de 2025 / Vitoria-Gasteiz, Álava, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España