Descripción de la Exposición
La cocina, como parte de la cultura, refleja una gran cantidad de simbolismos que provocan en nosotros una identidad, constituyen un factor de reunión; donde un platillo inocente sin ninguna pretensión estética o artística provoca una infinidad de emociones y lazos sentimentales entre los comensales que difícilmente se rompen.
Comer aúna en un cromático plato sentimientos que perduran, como los olores impregnados en el corazón de la natilla de la abuela o de la colada para secar el alma, que mamá preparaba para el regreso de la escuela con lluvia. Comer vitaliza al Ser, cuece sentimientos que nunca se pasan de su punto, genera experiencias que siempre estarán en el Diario del Recuerdo del ánima.
No olvidar es la propuesta del artista Alejandro Jaramillo, es un manifiesto orgánico y visual para que actualicemos la memoria en las cocinas, en las mujeres nutricias y los alimentos, en ese femenino manifiesto que fluye en hombres y mujeres con sensibilidad de duraznos. Para mantener vigente la tradición, el conocimiento y los alimentos ancestrales –semillas, frutos, tubérculos… Para no permitir que nos borren las imágenes cargaditas de olores, texturas y sabores que permearon “savia” y amorosamente nuestro Ser y que nos permiten vínculos con nuestra madre Tierra, vínculos más allá del tiempo y de esta des-escaldada realidad.