Aleksandr Ródchenko es una de las principales figuras de la vanguardia rusa del siglo xx y uno de sus artistas más complejos y polifacéticos. Explorador en pintura de un arte sin-objeto, a la cabeza del constructivismo en la Rusia posrevolucionaria y pionero de la fotografía soviética, pronto renunció a un arte «puro» en beneficio de la creación de un lenguaje visual al servicio de la sociedad, y extendió las fronteras de todos los medios con que siempre trabajó bajo el lema «Nuestro deber es experimentar». Con el objetivo de ofrecer una amplia panorámica de su trayectoria artística, la exposición reúne alrededor de 250 obras que representan las distintas vertientes de su investigación plástica, desde la pintura a la fotografía, pasando por el diseño (gráfico, de interiores, téxtil, escenografías y vestuario de teatro), el dibujo, el fotomontaje, el fotocollage o las construcciones espaciales. Comisarios: Jean-Claude Marcadé y Evgenia Petrova