Curtida por el sol y abandonada por los rusos, que la construyeron para albergar a los trabajadores de la única e inacabada planta nuclear de Cuba, esta ciudad soviética se encuentra ahora habitada y ha sido reinterpretada por los cubanos que llegaron allí desde todos los rincones de la isla. Estas personas dejaron atrás sus vidas, sus lugares de origen y sus casas, fueron a Rusia a aprender ruso y física nuclear con el sueño y la expectativa de ser parte de lo que se llamó “la Obra del Siglo”. Pero la Unión Soviética colapsó, el Proyecto fue suspendido, los rusos volvieron a su país, los cubanos con buena formación fueron trasladados a La Habana, Varadero y Moa, pero otros todavía están allí, en una inacabada ciudad, al lado de la imagen fantasmagórica del reactor.
Yuri Segalerba
Genovés trasladado a Berlín, arrastrado por su pasión por las zonas industriales abandonadas, trabaja en...la fotografía desde 2009.
El interés por la arquitectura, la arqueología industrial, la sociología y las minorías culturales le inspiran para elegir los objetivos de sus viajes, durante los cuales se adentra por los lugares más recónditos del planeta documentando diferentes situaciones sociales.
Sus fotos se caracterizan por las simetrías, las formas geométricas y las perspectivas centrales que tienden a aplanar el sujeto, dando una sensación bidimensional del mismo.
Entrada actualizada el el 07 jul de 2020
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