La artista japonesa Takako Okumura presenta en Twin Gallery “La burbuja del jamón”, su primera muestra individual en España, en la que, a través de esculturas de globo, tela y algodón, reflexiona sobre el concepto de realidad y lo que conocemos según la información que recibimos a través de los medios de comunicación, Internet o redes sociales. Todo este “conocimiento”, extrapolado al ámbito del imaginario colectivo, sufre grandes variaciones debido a las diferencias culturales. La exposición muestra reproducciones de esculturas icónicas de diferentes ciudades europeas, así como una instalación de más de 200 globos de jamón.
“Una gran mayoría de lo que conocemos lo hacemos a través de Internet, la televisión, periódicos... información en dos dimensiones de la que hacemos nuestra particular representación y que, a raíz de la penetración de la tecnología de la información, se ha multiplicado a causa de la velocidad y la cantidad de información que...compartimos. Pero el mundo está aún lleno de “no lo sé/sabía”s. Buscar información de un lugar desconocido te hace pensar que has estado ahí, pero una vez que llegas a ese lugar te das cuenta de que está lleno de “no lo sabía”s.
La diferencia entre la realidad visual percibida virtualmente y físicamente se puede entender comparando ambas, pero las diferencias culturales y de valores solamente se pueden entender convirtiéndote en esa tercera persona que la percibe. Esta desviación de la imagen y la realidad en cuanto a la parte superficial se acentúa debido a las diferencias culturales, como es el fenómeno de “La Burbuja”: hace tiempo me explicaron que en España sucedió un fenómeno llamado “la burbuja del jamón”. Habiendo nacido en Japón y criada en Japón, lo único que pude imaginar fue literalmente “La burbuja del jamón”, en este caso ni Internet me pudo dar una explicación a este fenómeno. El filtro cultural y de la imaginación crea en nosotros este “no lo sé/sabía”. Y este mismo filtro hace desaparecer las pistas para solucionar esta incógnita.
No obstante, conocer un problema o información desconocida nos crea una sensación difícil de explicar, que da espacio a una nueva interpretación. Una sensación de felicidad.
En Japón la burbuja económica explotó a principios de 1990. La especulación disparó los precios y alejó la economía real del mercado. Así, cuando estalla la burbuja económica, las acciones se convierten en un trozo de papel sin valor. Descubrí que el fenómeno de la Burbuja en España llegó hasta el jamón, propiciando una nueva crisis en el sector. El precio del jamón crudo comenzó a aumentar muy rápidamente y, en el momento del estallido de la burbuja, las paletillas y los jamones de cerdo se convirtieron en un nuevo producto de especulación. El jamón es diferente del dinero (en papel), dado que al ser orgánico puede pudrirse. Y esta idea o el conocimiento de esta realidad, que descubrí en España, no tiene nada que ver con cómo la hemos recibido en Japón. La información está filtrada por la cultura y por las ideas de las personas. Una “realidad” puede desaparecer por consecuencia de este filtro y, a día de hoy, sigo sin estar segura de si realmente existió esta burbuja del jamón. Imaginarme jamones flotando es una fantasía que me produce la misma sensación que cuando conozco una cultura que no conocía”. Takako Okumura
La artista japonesa Takako Okumura presenta en Twin Gallery “La burbuja del jamón”, su primera muestra individual en España, en la que, a través de esculturas de globo, tela y algodón, reflexiona sobre el concepto de realidad y lo que conocemos según la información que recibimos a través de los medios de comunicación, Internet o redes sociales. Todo este “conocimiento”, extrapolado al ámbito del imaginario colectivo, sufre grandes variaciones debido a las diferencias culturales. La exposición muestra reproducciones de esculturas icónicas de diferentes ciudades europeas, así como una instalación de más de 200 globos de jamón.
“Una gran mayoría de lo que conocemos lo hacemos a través de Internet, la televisión, periódicos... información en dos dimensiones de la que hacemos nuestra particular representación y que, a raíz de la penetración de la tecnología de la información, se ha multiplicado a causa de la velocidad y la cantidad de información que compartimos. Pero el mundo está aún lleno de “no lo sé/sabía”s. Buscar información de un lugar desconocido te hace pensar que has estado ahí, pero una vez que llegas a ese lugar te das cuenta de que está lleno de “no lo sabía”s.
La diferencia entre la realidad visual percibida virtualmente y físicamente se puede entender comparando ambas, pero las diferencias culturales y de valores solamente se pueden entender convirtiéndote en esa tercera persona que la percibe. Esta desviación de la imagen y la realidad en cuanto a la parte superficial se acentúa debido a las diferencias culturales, como es el fenómeno de “La Burbuja”: hace tiempo me explicaron que en España sucedió un fenómeno llamado “la burbuja del jamón”. Habiendo nacido en Japón y criada en Japón, lo único que pude imaginar fue literalmente “La burbuja del jamón”, en este caso ni Internet me pudo dar una explicación a este fenómeno. El filtro cultural y de la imaginación crea en nosotros este “no lo sé/sabía”. Y este mismo filtro hace desaparecer las pistas para solucionar esta incógnita.
No obstante, conocer un problema o información desconocida nos crea una sensación difícil de explicar, que da espacio a una nueva interpretación. Una sensación de felicidad.
En Japón la burbuja económica explotó a principios de 1990. La especulación disparó los precios y alejó la economía real del mercado. Así, cuando estalla la burbuja económica, las acciones se convierten en un trozo de papel sin valor. Descubrí que el fenómeno de la Burbuja en España llegó hasta el jamón, propiciando una nueva crisis en el sector. El precio del jamón crudo comenzó a aumentar muy rápidamente y, en el momento del estallido de la burbuja, las paletillas y los jamones de cerdo se convirtieron en un nuevo producto de especulación. El jamón es diferente del dinero (en papel), dado que al ser orgánico puede pudrirse. Y esta idea o el conocimiento de esta realidad, que descubrí en España, no tiene nada que ver con cómo la hemos recibido en Japón. La información está filtrada por la cultura y por las ideas de las personas. Una “realidad” puede desaparecer por consecuencia de este filtro y, a día de hoy, sigo sin estar segura de si realmente existió esta burbuja del jamón. Imaginarme jamones flotando es una fantasía que me produce la misma sensación que cuando conozco una cultura que no conocía”. Takako Okumura
Entrada actualizada el el 22 mar de 2016
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