Como cada verano, presentamos ahora una amplia selección de pinturas y dibujos, que se despliegan por todas las salas del Centro en un recorrido cronológico que es también el relato de toda una obra, ordenado en capítulos compuestos por conjuntos claramente diferenciados de trabajos que representan sus distintas etapas: los inicios dentro del movimiento internacional de posguerra de renovación de la figuración, la evolución hacia la abstracción, la plena integración en la Escuela de Nueva York (donde compartió escenario, entre otros, con sus amigos Robert Motherwell o Franz Kline) y la posterior evolución hacia un universo inequívocamente propio.