Esta muestra, comisariada por Fran Pimentel, recoge el legado de este artista surrealista en un recorrido por su producción, articulado a través de sesenta obras.
Iván Tovar nació en la República Dominicana en el año 1942, país donde comenzará a forjar su personalidad artística al inscribirse en la Escuela Nacional de Santo Domingo, para estudiar Bellas Artes. No obstante, será a lo largo de su estancia en París donde logre alcanzar sus mayores éxitos como artista, figurando como uno de los pintores contemporáneos más importantes de toda Europa.
Durante su estancia en la República Dominicana Tovar se relacionará con muchos de los artistas europeos emigrados a causa de las grandes catástrofes que se estaban sucediendo en Europa, entre los que destaca Eugenio Granell. A causa de su exilio en el año 1939, Eugenio Granell entrará en serio contacto con las artes plásticas y establecerá importantes relaciones con otros exiliados como André Breton...o Victor Serge. Años más tarde conocerá a Iván Tovar con quien mantendrá una corta, pero importante correspondencia epistolar.
La obra de Tovar conforma un universo propio y onírico, donde establece una nueva realidad. La crítica actual ha calificado el conjunto de su obra bajo el concepto de neosurrealismo, debido a que sus composiciones representan un mundo extraordinariamente simbólico y personal. Sus obras a través de las diferentes técnicas, formatos y soportes proponen una exploración detallada del deseo, como si fuera una especie de pájaro prehistórico monstruoso. De modo que gracias a su maestría, Tovar se convirtió en uno de los máximos exponentes del surrealismo de toda la contemporaneidad.
Imágenes de la Exposición
Iván Tovar, Antológica
Entrada actualizada el el 11 jun de 2014
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