Desde sus inicios, la Fundació Vila Casas ha centrado su atención en la promoción y divulgación del trabajo de los artistas contemporáneos catalanes que, independientemente de la disciplina en la que se expresan o la tendencia artística a la que pertenecen, dibujan un heterodoxo tejido calidoscópico de las artes plásticas de hoy en día.
En este contexto de análisis y estudio de la producción plástica de nuestro pasado más inmediato y de nuestro presente, la Fundació inició un programa de itinerancias, Itiner’art, con el objetivo de promover exposiciones de autores contemporáneos catalanes y foráneos que mantienen una estrecha relación con el territorio: muestras monográficas y colectivas de artistas que forman parte del fondo de la colección y que disfrutan de una dilatada trayectoria, tanto en el ámbito nacional como internacional. En esta ocasión, os presentamos una pequeña muestra de cuatro de estas exposiciones itinerantes:
Frank Horvat. Homenaje a Catalunya
«Homenaje a Catalunya» fue...el encargo que Antoni Vila Casas hizo al prestigioso fotógrafo internacional Frank Horvat (Abbazia, 1928). El proyecto tenía que captar la Catalunya de la primera década de 2000; la Barcelona plural y abierta al mundo, la Girona milenaria, las tierras del Ebro, las montañas de los Pirineos o el Cadaqués de Dalí dibujan entre paisajes, monumentos, personajes del mundo de la cultura y ciudadanos anónimos, un heterodoxo calidoscopio vivencial de la cultura catalana. Los recuerdos y las asociaciones de ideas almacenados durante años en el cajón de la memoria, de repente emergen en la superficie en forma de sensibilidad y experiencia artística para captar el instante del gesto preciso. Dividida en cuatro secciones: «Tradiciones, costumbres y hábitos», «Gestos, miradas y sonrisas», «Rastros, texturas y palabras» y «Ausencias, silencios y aromas», la muestra incide en todos esos elementos que pertenecen a nuestra cotidianidad y que el artista, a través de su mirada, precisa y sutil, transforma en relato.
Varios artistas. Otro mundo
A partir de un encargo a varios creadores del panorama contemporáneo catalán de expresar su particular concepción del mundo, surge la propuesta expositiva «Otro mundo»; una muestra que cuenta con 46 esculturas esféricas de pequeño formato que, en su conjunto, ofrecen una visión amplia y particular de los diferentes lenguajes artísticos que cohabitan en la actualidad.
El resultado es un gran pentagrama de colores donde las obras, concebidas desde diferentes concepciones plásticas y miradas estéticas, definen una melodía de acordes y silencios. La mirada onírica de algunas propuestas convive, así, con obras que ponen el acento en la crítica, a menudo irónica y, a veces, sarcástica, de un mundo las bases del cual parecen totalmente inestables. Inestabilidad que intenta sostener el andamio —una estructura en madera donde reposan las obras— que, de manera metafórica, referencia todos los mundos en construcción, el eje vertebrador de la muestra.
Jordi Belver y Daniel Giralt-Miracle. Mirada y gesto. 50 artistas. 1977-2007
«Mirada y gesto. 50 artistas. 1977–2007» es un proyecto a cuatro manos entre el fotógrafo Jordi Belver (Barcelona, 1950) y el crítico de arte Daniel Giralt-Miracle (Barcelona, 1944). Uno desde la fotografía y el otro desde la palabra, recuperan en este proyecto conjunto la complicidad de dos miradas que encuentran en el mundo de la creación un espacio de inspiración. En silencio, desde el respeto y la admiración, talmente como si se tratara de dos exploradores que necesitan pisar el territorio que les conducirá a la certeza, ambos autores se adentran en este cometido con el deseo de captar lo que queda oculto tras la máscara del rostro. El propio Giralt-Miracle nos aclara al respeto: «Como fotógrafo, Jordi Belver tiene dos obsesiones, una es la arquitectura, la otra, los artistas, de la primera le atrae la articulación de los espacios, su luz, sus sombras. De los segundos, lo que le interesa es el personaje, su pensamiento, su entorno, ir más allá del retrato para retener lo que, más que ver, ha vivido».
Baldo Pié. Des del balcó del meu silenci
Baldo Pié (Barcelona, 1929–1999) forma parte de una generación de artistas encabezada por autores tan reconocidos como Carlos Mensa, Joaquim Llucià o Amèlia Riera. A pesar de la formación autodidacta, su trayectoria atravesó diferentes períodos que le permitirían sumergirse en la investigación de nuevos procesos creativos. Desde la fase inicial de relieves matéricos con técnicas de retablo hasta una abstracción lírica, cuyo impulso gestual capta el sentido de la estructura y de la forma dando paso a la exaltación del color.
Después de experimentar con la técnica de la policromía, Pié se adentró en el mundo de la abstracción que, en palabras del crítico e historiador del arte Giralt-Miracle, «fue el momento en el que más bien orientada se encontraba su obra. Es en los cuadros de gran formato que, a partir de una estructura geométrica casi chillidiana, se alterna el trabajo de la materia, jugoso y gestual, con un geometrismo racionalista bien estructurado, que es el justo contrapunto para su afición a todo lo que sea magmático».
Entrada actualizada el el 08 jun de 2018
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