Descripción de la Exposición
La imagen del Cristo agonizante y moribundo en la cruz se puede destacar como una de las representaciones más poderosas de la religión católica, pues además de ser escena fundamental y principal en dicha religión, en ella se representa su muerte como un sacrificio necesario para la salvación de la humanidad.
No solo recae toda esta veneración al sufrimiento sobre la figura crucificada, sino que también la podemos observar en los mártires.
En ellos podemos ver cómo en la espiritualidad católica se repite la idea de que el sufrimiento y la muerte son un acto de lealtad y fe. Son vistos como modelos de santidad, y es por eso que se venera su sufrimiento, pues se ve como una forma de honrar su sacrificio, además de inspirarse en su ejemplo de fidelidad cristiana, pues eligieron morir antes que renunciar a su fe.
Partiendo de este contexto teórico, mediante esta producción pictórica, se pretende realizar una aproximación a aquellos lugares donde tienen lugar estos dos conceptos en los que se fundamenta la religión católica; sufrimiento y sacrificio. Para ello trabajaremos tanto el cuerpo humano como la arquitectura. Es decir, lo interior, intus; como lo exterior foris.
Por un lado tenemos el espacio donde tiene lugar el rito: la catedral, la iglesia, la religión institucionalizada; donde se rinde culto al sacrificio. Y por otro lado tenemos el cuerpo, a través del cual se ejerce la creencia de que el sufrimiento es un medio para unirse más estrechamente con Jesucristo y a través del cual se ofrece el dolor como una ofrenda a Dios.