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'Puedes dibujar un elefante del tamaño de una hormiga, pero no puedes dibujar una hormiga del tamaño de un elefante'. Así desafía Anna ... Parini a quien entre en la galería PARADIGMAS a partir del próximo 19 de julio. Y el desafío lo encara ella misma con el dibujo de una hormiga de 5 metros de ancho que cuelga de la pared en una postura de quien está de paso y que en cualquier momento bajará a la calle por la puerta grande. Con el gigantismo de su pequeña hormiga, la milanesa Parini, exitosa artista e ilustradora que colabora con periódicos de varios países, desde el New York Times, The Washington Post y The Boston Globe en Estados Unidos hasta La Vanguardia en Barcelona, deja evidente que hay un hueco enorme entre el 'saber que algo existe' y el conocerlo: mirar no es observar. Con el gigantismo de su intervención en PARADIGMAS, Parini trata de la importancia de las pequeñas cosas y así abre paso a la obra de Leopoldo Wolf, con quien comparte espacio en la galería.

Wolf, brasileño que actualmente vive en Barcelona, presenta 'IMITANT EL MOVIMENT D'UN ROBOT DE VERITAT' y ocupa toda la sala con sus dibujos en miniatura expuestos en mesas a modo de gabinete de coleccionista. Sus 'inscripciones' sobre el papel varían desde mínimas figuras a manchas que desistieron de la figuración para transformarse en imágenes que se repiten y se multiplican, imágenes que se deshacen y que se organizan en patrones que pueden ocupar toda una pared. Lo que Wolf expone son pensamientos que tienen soporte, contorno y forma que nos atrapa y nos lleva a pensar el dibujo, según la curadora brasileña Marília Panitz que firma el texto de presentación. 'Son grandes dibujos mínimos que casi esconden los múltiples detalles que les dan cuerpo'. En su texto, Panitz revela: 'tengo dos de esos en mi casa. Paso por ellos cada día. Casi invisibles, casi ilegibles. Y cada día me demandan mirarlos de nuevo... y ahí, me pierdo en ellos.'