Esta serie fue creada por Yolanda Botero mientras residía en Garraf (Sitges) durante el año 2011. "La cercanía de los niños de esta comunidad, sus risas y algarabías, dejaban en mi corazón una estela de alegría, una levedad de espíritu, que se fue materializando en estas imágenes surrealistas de gran inocencia y colorido. La presencia del mar con todos sus tonos, su serenidad y su furia, la llamarada de sus atardeceres, el incesante viento haciendo música con los mástiles de los veleros, y ese mar y ese cielo, igual de azules, o igual de blancos, en la brumosa atmósfera de una mañana invernal. El Mediterráneo se me metió al alma sin pedir permiso y fueron fluyendo las alegorías. Y mi niña interior les dirigía la acción a los chiquillos y todo era juego y empatía… ¡y ellos resultaron ser más surrealistas que yo!". Yolanda Botero.