Descripción de la Exposición
A veces, por pura fantasía, me gusta pensar en el dibujo como una tecnología de proyección. El juego (re) productivo de proyectar lo que aún no existe depende de la capacidad de inducir una visualización. Y el éxito de esa visualización depende, a su vez, de ciertas convenciones generalizadas sobre cómo vemos lo que aún está por existir. Estas convenciones están en gran medida condicionadas por las herramientas utilizadas para proyectar (lápiz, carbón, papel, reglas, setsquares, pinceles, programas informáticos, por ejemplo). Sin embargo, es paradójico que incluso si una proyección está determinada por una herramienta, para que sea una proyección no podemos ver ningún rastro de esa herramienta. No podemos ver las líneas de grabado, sólo la imagen, no podemos ver los píxeles, sólo la simulación.
Concebido como una tecnología de proyección, el dibujo a mano es un método anticuado. Lápiz, carbón de leña, pintura, todos dejan tras de sí una pista trémula detrás de un soporte opaco - cualquier tecnología, sin embargo, aspira a la eficacia, y la eficacia exige transparencia y precisión. Un artista -yo mismo, por ejemplo- insiste, en otro momento, en la lentitud, en la opacidad y en la fricción. Incluso insisten en utilizar mecanismos como mecanismos artísticos. Pero estos mecanismos no lo son por lo que ofrecen "productivamente", todo lo contrario. Son artísticos porque entran en disputa con el tiempo. La fricción es una disputa con el tiempo. En esta disputa, a pesar de las intenciones de la disciplina, las inexactitudes y los accidentes se introducen señalan lo que no existe. Esta es la premisa de la exposición.
La práctica de Bernardo Ortiz se define por el cuidadoso entretejido del dibujo, la filosofía, el diseño y la escritura en obras cuyo apoyo -aunque decisivo- actúa como espacio de convergencia y tensión. Capas infinitas de aceite o de esmalte, repetidas palabras descontextualizadas cuidadosamente colocadas sobre un papel que recuerda una constelación de estrellas, cientos de líneas sutiles hechas en grafito, marcas diminutas en tinta china o guache, o una sucesión de pliegues metódicos y aleatorios, son Pocas de las estrategias formales empleadas por el artista; Además de enfatizar la bidimensionalidad del soporte, estas estrategias ponen énfasis en el significado del acto de hacer. Completadas por largos procesos de acumulación que sugieren el paso del tiempo, las obras en perspectiva buscan destacar la noción de superficie como territorio catalizador donde lo pictórico, lo literario y lo impreso se juntan en un juego visual y conceptual basado en el vocabulario De la pintura moderna. Libres de marcos y siempre "expuestos" para manifestar su naturaleza vulnerable y aprehender su materialidad, los dibujos de Ortiz no son sólo comentarios sutiles sobre la pintura, sino también reproducciones sobre un soporte que articulan la compleja relación entre imagen y texto.
Exposición. 26 feb de 2025 - 01 sep de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España