Descripción de la Exposición
Didáctica de lo impresentable / Marcelo Mellado
La instalación del artista visual Antonio Guzmán, “Lección de geografía”, que está dentro de una obra mayor que él mismo titula como “Escuela de Instrucción Didáctica”, da cuenta de que los protocolos pedagógicos republicanos, además de ser un leitmotiv en su obra, son un modo de visibilidad y legitimidad de la escena político-administrativa.
A partir de esto, podemos decir que el eje central que le da sentido a su propuesta es la educación, y cuya clave concreta es el proceso instruccional como diseño de control de la infancia o del sistema administrativo de aquellos cuerpos dóciles que son el objetivo institucional en el diseño de la cosa pública.
A nivel de composición el trabajo específico se define por la ocupación de un espacio galerístico acondicionado para exponer arte. Estamos en un museo local que exhibe un paradojal patrimonio comunitario, como pueden ser los restos incómodos de una batalla (porque una guerra civil no es un contenido que sea motivo de orgullo patriótico republicano) y que es usado ocasionalmente para exhibir arte y realizar otras actividades comunitarias. Este dato no es menor en la estrategia de obra.
El trabajo específico se construye a partir de desechos de la escolaridad formal que pertenecen a la tradición republicana, esa que ligaba el desarrollo nacional a la educación pública. La instalación se resuelve en varios niveles de composición, por un lado, la pintura alusiva a la escolaridad clásica, hoy en emergencia (con mascarillas que se transforman en capuchas o a la inversa), cuyo soporte lo constituyen las cubiertas de las sillas tipo universitaria que son parte de un mobiliario escolar desarticulado y las cajitas, por otro lado, de corte didáctico con símbolos patrios. Y, además, las referencias cartográficas escolares con los puntos cardinales, como una lección básica de geografía que es la base afirmativa del territorio patrio, incluyendo sus íconos representativos. Todo esto con el uso de materiales de baja intensidad, como témpera, acuarela y tinta china.
Uno de los episodios clave del relato, lo llamaremos así, porque de algún modo, del proceso composicional se desprenden elementos de una narrativa episódica de la educación como correlato histórico de la decaída formación republicana -y de los fantasmas que la constituyen-, es el tópico del burro maestro, en el registro de la fábula clásica en que los personajes y los valores se invierten, como en las fiestas carnavalescas.
El arte, y en este caso las artes visuales contemporáneas, están centradas en la investigación crítica de procesos sociales conflictivamente determinados. Hay una mirada descomposicional de una institucionalidad que se diluye en una iconografía degradada, en donde todo está a punto de autodestruirse o incendiarse. Esta obra interpela al Estado docente en su modo de producción iconográfica y en su ideología geopolítica clásica.
La producción de arte interpela a un proceso institucional que pretende volver a una normalidad esquiva, cómo si la institucionalidad educativa fuera eterna o siempre la misma, y la voluntad de repetir o reproducir el mundo prepandemia, fuera la condición neurótica de un mundo maloliente que no queremos que se termine, porque es el único que conocemos. Interrogar e interceptar ese momento patético del estado nacional que no puede sentir (y asumir) los signos de la catástrofe, es uno de los modos insoportables de ciertas puestas escénicas del trabajo de arte, como lector privilegiado de los lenguajes institucionales.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España