La muestra se compone de casi una veintena de obras de mediano y gran formato y de un lenguaje artístico vanguardista con colores muy vivos e intensos que transmiten una gran vitalidad.

Él suele describirla 'de abstracción lírica, atmosférica y casi cósmica', ya que le gusta expresar a través de colores y gestos las experiencias y sensaciones que en el momento de enfrentarse al lienzo tiene en su interior.

Realizó su primera exposición en 1972 en la Galería el Caballo de Troya de Valladolid. Desde entonces han sido numerosas las muestras realizadas tanto en exposiciones individuales como colectivas y ha recibido gran cantidad de premios y menciones.