Descripción de la Exposición La primera exposición de Sascha Weidner en la Galeria Toni Tàpies coincide con su primera muestra en el estado español. Enduring Beauty está compuesta tanto por sus obras más recientes como por trabajos anteriores invitándonos a conocer su trayectoria artística. “Enduring Beauty relata y retiene aquello que la mirada sólo recorre superficialmente, aquello que permanece sólo como un vago momento en el recuerdo. En alusión a una política de guerra desastrosa y al parecido nombre de una ofensiva militar, el artista Sascha Weidner cuestiona pretensiones de verdad y vigor y muestra una contradicción inherente: Aquello que no tiene una existencia propiamente dicha, lo que no es absoluto ni posee un derecho completo al vigor, tampoco puede ser duradero, como es el caso del término Belleza. Lo que tiene potencial para ser estigmatizado como «convencionalmente bello» es destronado y al mismo tiempo elevado de nuevo mediante la estética del lenguaje de la imagen.
Sascha Weidner escenifica la belleza de lo pequeño, el detalle despojado de lo efímero del contexto cotidiano del que toma sus motivos, toma ese recorte y, liberándolo, le otorga algo monumental sin celebrar al mismo tiempo un gesto marcante – sin una perspectiva exagerada, sin distancia espacial ni fusión de masas. Weidner propone una nueva definición de la forma y el objeto, crea un contexto propio que no atraviesa la frontera de la alienación. Las figuras parecen flotar en la niebla, al lado, el avión en la pared – el espectro asociativo abarca desde la rabia destructiva infantil hasta el incontrolable caos adulto. Y junto a la tranquilidad y a la sencillez de sus motivos y a la emotividad de sus escenificaciones, el artista expresa su ironía – bajo la piel, las venas se convierten en ramificaciones de río, la chaqueta tirada en la Virgen.
Es la casualidad la que aporta el humor y la estética. Al mismo tiempo, el artista utiliza la transformación para romper la estética. El artista se mueve por la fantasía, por los detalles de su propia vida, sin hacer referencia a algo elevado, sin deformar la dimensión y el tamaño del objeto. Sus motivos, lo mismo que sus títulos, son referencias biográficas y metáforas de lo vivido – un juego con mensaje y al mismo tiempo una valoración objetiva nueva. El observador puede elegir entre buscar el origen o seguir tejiendo a su gusto la historia en la que el artista invita a pensar. Sascha Weidner no restringe la captura de lo que le rodea sólo a lo vivido por sí mismo, sino que se inspira en la herencia de la Historia del Arte y desarrolla sujetos existentes: L’amand II en referencia a Los Amantes de Magrittes, Bernd & Hilla II como torres de agua. Al hacerlo, se ocupa menos del concepto y más de la forma. También se encuentran aquí, retratados en primer plano, lo subjetivo del artista, su vida interior, su percepción. Para el artista, el proceso de la búsqueda de la imagen no finaliza con el disparo de la cámara: El motivo continúa desarrollándose y en ocasiones se le dota de un polo opuesto, sea en el título o en su colocación en la sala. Los motivos sueltos, dispuestos por él en la sala en forma compositiva, se convierten en estructuras narrativas gracias a la conexión entre ellos, en episodios visuales intercomunicantes. Esta integración del espacio en la búsqueda de la imagen muestra un claro paralelismo con los desarrollos de los años ochenta en fotografía – la instalación de retratos de Susanne Brügger [1985] rompiendo con la presentación lineal invita a la comparación, lo mismo que el Schein des Vertrauten [1985–86] de Volker Heinze. Weidner rompe también con la disposición lineal y los formatos idénticos. El tamaño y la altura a la que se cuelgan las obras en la sala varían y sólo abren otro nivel de significado cuando se contemplan de nuevo.
En Enduring Beauty, Weidner muestra tanto sus trabajos más recientes, realizados durante su segunda estancia en Los Ángeles como becario de DAAD, como obras anteriores. Enfrentados, refleja tanto sus creaciones como la estructura narrativa autobiográfica que se abre paso por toda su obra. Su interés se centra en el trato lúdico con la polaridad – la escenificación monumental se entremezcla con el título humorístico, el motivo realzado con la disposición a poca altura en la sala. El gran e impresionante formato se ve relativizado por la proximidad directa a la proyección de una imagen sobre la pared cuya durabilidad viene determinada por un botón conmutador y por la duración de la fuente de luz.
Las cosas y las afirmaciones que parecen contradictorias se unen entre ellas en forma de composición y llevan al observador a un contenido posterior de la verdad y a un nuevo nivel de significado en los que las contradicciones parecen haberse eliminado. Lo que si es duradero es una experiencia y una interpretación personales resultantes de este trato dialéctico que los cuadros de Sascha Weidner ponen en las manos del observador – una belleza del motivo que se experimenta de forma individual.”
Exposición. 31 oct de 2024 - 09 feb de 2025 / Artium - Centro Museo Vasco de Arte Contemporáneo / Vitoria-Gasteiz, Álava, España