Descripción de la Exposición Hace ya algún tiempo -corría por aquel entonces el año 2005- Gijón tuvo la oportunidad de conocer la obra de un joven artista proveniente de la isla de Mallorca: Tomeu Coll. Hoy de nuevo nos llega el trabajo de una carrera sin freno. Reseguir mínimamente su trayectoria nos daría la razón: lo vimos en exposiciones individuales en Palma, en 2007 con la exposición "Què sap el peix de l'aigua on viu tota la vida?" ("¿Qué sabe el pez del agua en la que vive toda su vida?") y en 2004 con "Frases"; -inaugurada en "la Nit de l'art",una noche muy especial en el panorama artístico de la isla -en Madrid, en 2007, con "Palabras pintadas", en Gijón, con "Inquietudes", en ese año de 2005 y en Inca, en 2004, con "El camino de la mente". Pero lo vimos también en toda una serie de exposiciones colectivas en las que ha participado en distintas ciudades europeas: por ejemplo en varias ediciones del DeARTE contemporáneo en Madrid, en la Holland Art Fair en La Haya, en el LINEART en Bélgica, en el MARB-ART en Marbella, o en galerías de Madrid, Barcelona o Valencia entre otras. El que tiene entre sus manos cuenta seis entre los catálogos que se le han editado y asimismo apareció en distintos catálogos colectivos. Con estas cuatro pinceladas sobre la trayectoria de Tomeu Coll, la idea con la que abríamos las primeras líneas queda más que bien ejemplificada: estamos ante la obra de un artista en la plétora de su producción y creatividad, un joven artista que explora, que dice, que prueba, que acierta y, a veces también, yerra, pero que, ante todo, tiene la continuidad que afirma una voz personal muy atrayente. En transición Continuidad, transformación, transición, evolución... Todas ellas palabras en parentesco y que nos ayudan a enmarcar esta nueva exposición de Tomeu Coll. Quizás una de las líneas de continuidad que más manifiesta se nos presenta es la temática. Ya las pinceladas primíparas del artista nos hablaban de temas principalmente sociales, a veces planteando críticas, a veces simplemente dudas o cuestionamientos. En esta ocasión, la temática social es, de nuevo, bien patente. Y aunque una buena parte de los cuadros pareciera que nos dicen de cosas muy otras que no la cuestión social, si se lee la exposición como un todo, se ve que la lectura de éstas como reacción a lo que nos plantean los cuadros de temática más abiertamente social no es ningún desbarro. Esta temática social que preña las obras de Tomeu Coll desde sus inicios, junto con otra que atañe más a la esfera personal y que siempre también tuvo cabida en su obra -aunque quizás no en la misma medida que la primera- nos dicen de la mirada del artista: al contemplar sus obras, el espectador contempla la vida, el mundo, a través del ojo del artista. Porque de eso nos hablan sus obras: de la vida. Son 26, en esta exposición, los cuadros que nos invitan a esta nueva incursión por el mundo artístico de Tomeu Coll. Y al lado de obras que cuestionan actitudes del hombre en sociedad ("¿Dónde vamos?", "Beber sin sed", "Sin acuerdo", "¿Quién es el culpable?", "Más contaminación", etc.), hay otras en las que se dibuja la necesidad de salir de esta espiral ("Al margen de la sociedad", "Escapar"...), y después otra serie de obras que plantean reacciones ("Grito", "No puedo más", "Es lo que hay"...) y soluciones: el arte como la realización de otros mundos que son posibles. Así desde el mundo del sueño ("Sueño") o de la lectura ("Otro mundo") hasta el mundo de la pintura, con toda una serie de obras meta-pictóricas en las que muchas veces el mismo artista aparece representado en su labor ("Mi vía de escape", "Hacia lo abstracto", "Sencillez", etc.). En "En transición", se nos presentan arte y vida, vida y arte íntima e inextricablemente ligados. Puede que más que nunca en esta exposición, aunque como un nuevo estadio de desarrollo de una línea que viene siguiendo y cultivando desde los inicios de su carrera artística, se presente claramente este vínculo: las 26 obras que forman el itinerario de "En transición" surgen de la fusión de la reflexión intelectual y estética sobre la vida y sobre el propio arte. Una cuidadosa fusión de medio y mensaje, de forma y fondo, de contenido y continente que mantiene exitosamente un equilibrio no siempre fácil que hace de estas obras una expresión armónica, meditada, significativamente bella. Estamos, pues, ante una reflexión hecha en y desde el arte, que expresa un punto de vista ante una actitud muy de nuestros días de no pensar más allá de hoy, de no pensar, en definitiva, en el futuro. Una actitud que puede dejar al individuo sensible confundido y en un estado de transición de allá donde está a ese otro mundo deseable y al que, tal vez, por el momento, sólo a través del arte pueda uno acercarse a él. La reflexión, el pensamiento, la opinión, la subjetividad hecha objeto, objeto de arte, obra artística. Es el fin que persigue el pincel de Tomeu Coll con el acto siempre viejo y siempre nuevo de pintar: ese decir sin palabras, ese desnudar su voz mojando la punta del pincel en ella, esa voz sin formas transformada, hecha nueva forma.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España