Descripción de la Exposición
El Museo Nacional de Cerámica junto con el Museo de Cerámica de Yingge presentan la exposición "Elogio de la cultura.
Tras el desarrollo desde su uso para el hogar hasta la creación artística de antigüedades, la cerámica taiwanesa ha alcanzado gran popularidad y buena reputación a nivel internacional. Tras quince años de esfuerzo, el Museo de Cerámica de Yingge ha establecido relevantes contactos e intercambios institucionales a nivel internacional, lo cual le ha permitido una mayor afiliación en el extranjero para dar a conocer la historia y la esencia de la cerámica taiwanesa mediante intercambios o giras de exposiciones.
La colección "Elogio de la cultura. El arte de la cerámica taiwanesa pintada" ha estado expuesta de junio a agosto de 2014 en el Museo Ruiz de Luna de Talavera de la Reina, después de haber pasado por el Museo de Porcelanas de Alemania (Deutsches Porzellan Museum).
EL MUSEO DE CERÁMICA DE YINGGE
El Museo de Cerámica de Yingge, en la Nueva Ciudad de Taipei, fue abierto al público el 26 de noviembre de 2000. En estos quince años se ha convertido en el principal museo de cerámica de Taiwán promoviendo el desarrollo de la producción cerámica de Yingge y potenciando su imagen fuera de las fronteras taiwanesas.
Yingge es una ciudad situada al sur de Taipei, centro de la producción cerámica taiwanesa desde hace más de 200 años, con numerosas fábricas, talleres y pequeños estudios que en la actualidad continúan con esta tradición cerámica.
Las producciones más antiguas datan del periodo Neolítico, aproximadamente hace 3500 años. Las diversas oleadas de inmigración desde China continental contribuyeron al afianzamiento de sus tradiciones cerámicas. En el siglo XX la industrialización de Taiwán fue decisiva para la industria de la cerámica que alcanzaría un importante desarrollo. Sus productos además de ser exportados con una gran demanda, alcanzan una gran maestría técnica siendo esta industria un centro de innovación tecnológico así como un centro de reflexión y de creación artística.
Hoy en día las cerámicas de Yingge son conocidas por su calidad, rico colorido y elegancia artística. Una producción que abarca desde los objetos de uso cotidiano o la cerámica arquitectónica hasta la cerámica de artistas y diseñadores que investigan nuevos colores para los vidriados y nuevas técnicas de producción.
RECORRIDO POR LA EXPOSICIÓN
A través de 89 piezas se muestra un recorrido por el origen y la historia de la cerámica taiwanesa, quedando articulada en tres áreas temáticas: "El auge del arte de la cerámica taiwanesa pintada", "la prosperidad de la cerámica pintada y su exportación al mundo" y "el cambio de las cerámicas pintadas".
En ellas se pretende mostrar al público la belleza de unas producciones que comienzan adornando los utensilios de uso cotidiano con flores y peces con la esperanza de tener buena fortuna en la vida y como a través de los artesanos y de la experimentación de las fábricas oficiales que llevan el vidriado a sus más altas cotas de desarrollo, hicieron que las fábricas de Taiwán alcanzasen un peso y una relevancia singular.
EL AUGE DEL ARTE DE LA CERÁMICA PINTADA
La industria de la cerámica en Yingge comienza en el periodo final de la Dinastía Qing (1796-1911), centrándose la producción en utensilios domésticos realizados con arcilla oscura y decorada tan solo con algún elemento floral esquematizado aplicados bajo cubierta.
Durante el periodo de la ocupación japonesa de Taiwán, Yingge se vio beneficiada de la industrialización general de la isla. Los japoneses explotaron la arcilla blanca de la zona de Beitou que se manufacturaba en pequeños talleres familiares organizados en cooperativas. La fábrica de cerámica de Beitou se nutrió de ceramistas venidos desde Kyoto que aportaron un estilo más delicado y elegante.
Después de la ocupación japonesa la Fábrica de Beitou empezó a producir una gran cantidad de platos y cuencos para satisfacer la demanda local. Piezas pintadas a mano con dibujos de peces, flores, camarones, etc., que expresan el deseo de una vida próspera y alegre.
PROSPERIDAD DE LA CERÁMICA PINTADA Y SU EXPORTACIÓN AL MUNDO
Después de 1956 los ceramistas de Yingge comenzaron a usar la arcilla blanca de Beitou fabricando una porcelana delicada y llegando a altas cotas en el desarrollo de las técnicas de la pintura cerámica. Cabría destacar en los años cincuenta y sesenta del siglo XX los platos decorados con el típico estilo Yingge que garantizaban éxito y fortuna a sus poseedores.
Grullas, urracas de alas azul celeste, camarones y pequeños motivos florales decoran la porcelana utilitaria de estos años.
También son los años de las primeras cerámicas artísticas a los que se une el retorno a las viejas decoraciones de la cerámica China de las dinastías Qing y Ming, cerámicas de gran éxito internacional, que llegan a ser un producto muy demandado para la exportación a los países occidentales.
En 1972 la compañía "Cena Porcelain" (The China Art Ceramics Co., Ltd) introduce técnicas y materiales de Japón, empleando a reconocidos pintores de Hong Kong para la enseñanza de las antiguas técnicas de la familia rosa, Doucai y la pintura azul y blanca de China. De esta manera se crearon piezas de gran calidad, convirtiéndose Yingge en la mayor fábrica de cerámica a imitación del estilo del antiguo, reuniendo en ella a un grupo de pintores sobresalientes.
El comercio internacional de Taiwán en lo que se refiere a estos productos, llegó a su punto álgido en 1987 siendo la época dorada de la exportación de la cerámica de Taiwán. Se exportaron cerámicas utilitarias, pero también arquitectónica, decorativa e industrial.
EL CAMBIO DE LA CERÁMICA PINTADA
Desde los años 90 el mercado de exportación pasó a ser ocupado gradualmente por China continental a lo que se unió la recesión económica que afectó al mercado del coleccionismo de antigüedades. Las fábricas taiwanesas tuvieron que plantearse una alternativa de mercado. En consecuencia y tomando como base la utilización de las técnicas más sofisticadas, las fábricas de cerámica investigan y desarrollan nuevas técnicas y decoraciones, tratando de conservar el carácter tradicional de los hornos oficiales y al mismo tiempo buscando nuevas posibilidades para las cerámicas pintadas con la intención de reincorporarse al mercado de consumo y satisfacer las necesidades de los coleccionistas más exigentes.
Vinculados a los hornos de fábricas reconocidas, un grupo de artistas serán los renovadores del lenguaje de la cerámica taiwanesa pintada, que albergará a partir de ahora elementos del lenguaje del arte contemporáneo como son Shi-ch Li o Wei-cheng Huang. A comienzos del siglo XXI muchos artistas han seguido vinculados a las fábricas creando obras muy destacadas, donde la poesía, la pintura, la caligraQa y la música taiwanesa son fuentes de inspiración junto con la memoria y la experiencia. Feng-chung Pai es un ejemplo de estos artistas fascinados por el colorido y el contraste.
Para finalizar este recorrido por la cerámica taiwanesa la exposición se cierra con las producciones cerámicas más vanguardistas donde los símbolos tradicionales son reinterpretados por artistas que ya no se vinculan a las fábricas sino que trabajan en sus propios estudios. Muchas de las obras expuestas han sido galardonadas con los premios que otorga el Museo de Cerámica de Yingge. Destacaremos la obra de Bo-yu Lin o de Yen-yu Lu, dos artistas jóvenes premiados en los últimos años.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España