La obra de esta artista esta basada en el estudio del grabado especialmente el monotipo.

Después de trabajar durante catorce años sobre el grabado ha ampliado sus soportes para ello se ha servido de la escultura.

Dando lugar a las obras que conforman la exposición “El jardín de la memoria”: cajas, rompecabezas, porque para ella la memoria funciona como cubos, que a veces abriéndose y otras permaneciendo cerrados te devuelven al pasado.

La artista siempre elige el papel y siempre tiene necesidad de despojarse.

Ha trabajado sobre la memoria individual, le interesa como aparece, como se olvida y como… a veces la recuperamos con un olor.

Para ello utiliza fotografías sobre raíces con las que quiere expresar la profundidad en alguna de sus obras, otras ... no lo son tanto, no son tan accesibles… como la memoria.

“El jardín de la memoria “ cuenta también con las raíces reproducidas sobre papel coreano en soportes modulares.

Esta primera exposición individual en Madrid de Esther Villalobos es el resultado de su aprendizaje de grabado realizado en Suiza y de fotografía en Nueva York pero como dice la artista “nunca llegamos a completar un trabajo”.

Pero la clave de su obra si se ve reflejada en este trabajo y no es otra que la ensoñación.