Bajo el título EL HOMBRE ATRAPADO, la Casa de la Imagen presenta una selección de las últimas obras del reconocido artista Pedro Avellaned. No es la primera vez que el artista expone en Logroño, ya que tuvo su primer contacto con el público riojano en el año 1986; treinta años después, sigue siendo una de las figuras claves de la imagen apropiada en España.
La obra de Pedro Avellaned, basada en la memoria, refleja un mundo interior que bebe en la infancia y en lo íntimo, en el secreto y en lo mítico. Una lucha antagónica de placeres y pecados, de poderes terrenales y religiosos, de lo onírico y lo real, conduce la obra de Pedro Avellaned hacia un universo que huye de convenciones. Juntando piezas, unas veces apropiadas y otras creadas, desprovistas de sus significados primigenios, crea una nueva obra que transciende las fronteras de las piezas originales. Todo fabricado...con la técnica del collage clásico, en su mesa llena de marcas de cúter, impoluta, como si fuera la de un cirujano que se dispone para un transplante. Hacer más con menos, casi con precariedad de medios, confiere todavía más valor a estas obras que presentamos, que hacen un relato en primera persona del singular de una de las autoridades del collage en nuestro país.
Para definir el trabajo de Pedro Avellaned, nos viene “al hilo” lo que Gilles Mora concluye en su Petite lexique de la photographie, refiriéndose al collage: este tipo de reciclaje facilita “el estallido de los límites tradicionales de la fotografía”. Pedro Avellaned deja de hacer algo que es inherente a la fotografía: la reproductibilidad. Sus obras son piezas únicas y nunca las reproduce para realizar tirajes numerados. Lo que se vea en la sala de la Casa de la Imagen será difícil que se vuelva a ver en otra sala, así es Pedro Avellaned... un original.
Entrada actualizada el el 27 oct de 2016
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