La muestra es el resultado de un recorrido de tres años donde Piovano exploró el centro, litoral y norte de Argentina, en más de 15.000 kilómetros en medio de extensas plantaciones principalmente de soja. Sobre la colección expuesta, se puede leer en la presentación: “Las fotos de Pablo E. Piovano son arte o son denuncia? Por qué no pensar que pertenecen a una misma clase de expresión creadora, la de un arte poco frecuente en estos tiempos de banalidad y espectáculo, un arte que nace de una necesidad de justicia... Los estragos que produce el uso de agrotóxicos refieren, en efecto, un exterminio que en su intimidad se despliega, confidencial, en los retratos de los dañados que enfoca la cámara de Piovano, con un respeto absoluto a la vez que una sinceridad conmovedora.”