Descripción de la Exposición
Cuando Rosemarie Trokel tejió la pieza Cogito, Ergo sum en una bufanda o cuando Isa Restheiner bordó letras del alfabeto fenicio en una serie de rectángulos de lino, se reconsideraron por primera vez, tanto irónica como poéticamente, las tradicionales labores femeninas vinculadas a la artesanía y el bordado. Algunos artistas, han tomado la práctica textil como un punto de referencia en sus trabajos como lo demuestran las extraordinarias piezas de Teresa Lanceta, los trabajos de algodón de Asger Jorn o los tapices de Joan Miró.
En las obras de Mónica Jover (Alcoy, 1974) nada está totalmente incluido; son piezas en espera de lograr un contenedor al cual se adaptarán como un guante, se adherirán como una segunda piel, pues unos haces de hilos se escapan de la capa pictórica para colonizar unos territorios que hasta ahora les eran ajenos, cambiando de este modo la coordenada espacio temporal de sus ventanas verdes desde las cuales unos hilos gritan, salen del cuadro, se escapan y se expanden a su alrededor. Sus Jardines remendados, trepan, van más allá de la esquina o vértice de la sala. Sus Jardines verticales evocan los lucernarios o ventadas del espacio de Espai Nivi y los traspasan, derramando su verde por el suelo cual lengua de musgo o césped. Sus Tótems y hasta sus ventanas «vitaminadas» a manera de trompe l’oeil (por cierto, de un rigor colorista que nos retrotrae a los tapices de Miró repletos de rojos, blancos, azules, amarillos o negros), vienen a ser como formas de estar o vivir en el espacio. Jover realiza un riguroso tensado de hilos hasta formar insólitos planos arquitectónicos como campos de color, a veces incluso con escaletas que van del verde vibrante al rabioso amarillo cítrico. Todo ello da una potente sensación de frescura, de bosque verde donde se oye el murmullo el agua de un arroyo cercano.
Las piezas de Mónica Jover nos invitan a una refrescante mirada ecológica. Los paisajes interiores de Jover son nuestros paisajes de alma, su tierra es la tierra que pisamos y su hogar siempre es aquel a donde son llevados. Sin olvidar que su apertura al entorno es aquella ventana albertiniana que se expande y nos reconecta con la clorofila de la vida.
© Silvia Tena
Comisaria
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España