El Bosque de los abatidos es sin duda un trabajo formidable de la artista Jaqueline Bonacic-Doric. Su proceso sobre el dolor, es agudo y complejo, La artista de origen chileno utiliza las técnicas Andinas del cosido, del atado en una instalación escultórica realizada en la sala La Hojalatería del Museo. Un bosque de espectros Totémicos nos despiertan sensaciones aterradoras de los miedos soterrados, del pavor que engendra el género humano ante situaciones desesperadas. Ella ha querido rescatar a los abatidos y levantarlos para que los miedos alcancen la presencia necesaria y el público pueda contemplarlos sin acritud. Desde el espejo donde todos nos reflejamos y que identificamos como propios. Es sin duda una experiencia pasear entre este bosque tan enigmático como revelador de aquellas voces que vienen de las sombras de nuestros pensamientos.
El bosque de los abatidos no es lo que parece... como una metáfora disfrazada se presenta como otra...de las tantas mentiras de nuestro tiempo. "El bosque de los abatidos como toda forma o sustancia en la naturaleza y en arte, es una llamada a la tolerancia, a la pérdida del miedo" comenta la artista. Celebración de lo diverso. Un bosque que trasciende el pánico de lo humano y homenajea a las víctimas en este 11 de Septiembre que inaugura la exposición.
Todo ser viviente sacrificado o destinado al sacrificio, aquí vuelve a ser, a manifestarse, como la fertilidad de la tierra.
Entrada actualizada el el 15 sep de 2015
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