Existe un mundo a la luz y otro que sucede en silencio. Seguramente algo pasa más allá de nuestra propia vigía. Nos encontramos en un estado de cosas por el que nos vemos rebasados, un hemisferio despierto y otro dormido, como el gato de Schrodinger, lo desconocido e inaprensible se apodera de nuestro entorno, en realidad, la mayor parte de los acontecimientos se producen en un espacio inconcebible. No podemos ser tan atentos, ni estar tan enterados de todo lo que se mueve a nuestro alrededor. Estamos rodeados de puntos ciegos, si vemos para enfrente no podemos ver lo que está detrás, estamos rodeados de incertidumbre, pero con o sin nuestra atención el universo acontece.

El arte no sólo es conocimiento, progreso y visibilidad. Dirididuh- Diridilah, no significa nada, se presenta como una segunda voz que aparece constante pero sin ... invitación en nuestra vida cotidiana, es el sonido común con el que tarareamos una canción que del todo no sabemos su certeza, así se expone nuestra relación inmediata con el espacio abordando la ignorancia, el backstage, esas situaciones de pérdida que se vinculan sí a veces con el romanticismo, pero también con un acto de justicia -porque también tendría que haber el derecho a la decepción, al desconocimiento, a la equivocación, a enamorase, al desaprender, al tedio, a la fe y la complicidad-. Lo generoso de una obra de arte es que su quehacer no implica absolutos, es esquiva, tartamuda. 'Los libros bellos están escritos en una especie de lengua extranjera'.