La materia prima de un trabajo editorial puede ser pensada de manera similar a un material escultórico, pictórico, performático o instalativo. Al hacer una publicación podemos habitarla como el espacio de una experiencia que nos sucede ahí mismo, entre sus páginas. Con Julia imaginamos ensayar Diario de una escultura y otros relatos de manera parecida a un fanzine. En nuestra maquetación van a descubrir elementos que se repiten a lo largo de las páginas pares e impares. Van a encontrar pliegos que montados a caballo conforman dobles páginas. Hay algunos acentos tímbricos y cierto énfasis en nuestro pliego central. Hay silencios. Va haber momentos de lecturas y de presentación. La portada es vidriada y da a la calle, su anverso es parecido a ella misma. En sus manos tienen la contratapa, les proponemos que la hagan circular. (del texto curatorial de Lucas Di Pascuale)