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Angèle Etoundi Essamba (Duala, Camerún, 1962) es la fotógrafa africana de mayor prestigio internacional. Aunque se trasladó a París con diez años y estudió en la Escuela Profesional de Fotografía de La Haya y trabaja desde Ámsterdam, su visión de la mujer africana ha sido reconocida desde 1985 en numerosas exposiciones de todo el mundo, entre ellas, las Bienales de La Habana (1994), Venecia (1994), Bamako-Mali (2001) y Dak'Art de Senegal, en 2002 y 2008.

  La exposición 'Desvelos' incluye en LATITUDES FESTIVAL FOTOGRAFIA HUELVA 35 imágenes que ponen de manifiesto el empeño de esta artista en representar a la mujer negra como símbolo para transgredir los estereotipos, yendo por encima de todo, capturando la vitalidad, la fuerza interior y el orgullo que emana de ellas.

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  Con sus fotografías lucha contra los clichés que las marginan y les impiden que tengan su propia identidad. Se empeña en que las veamos más allá del velo, en descubrir una mirada que guarda toda una vida que exige libertad y derecho a una identidad propia.

  Angèle Etoundi Essamba hace que el velo no sea un impedimento para penetrar libremente en unas miradas que van más allá del valor místico y estético que damos a esta prenda y quieren estar libres de prejuicios.

  En 'Desvelos' quiere enseñar a la mujer por sí misma, dejar al velo en su mera función de prenda decorativa, objeto de belleza desprovisto de otras cargas simbólicas. Para nada se oculta la valentía del acto de que una mujer africana nos muestre a la mujer africana del siglo XXI, en un intento por acercarnos los unos a los otros, por romper barreras injustificables, transmitiendo la historia y emociones propias de un continente en el que la belleza, la fascinación, la fuerza y la sensualidad de la mujer es realidad más que símbolo.

  Parte de esta obra fue realizada en la isla de Zanzíbar frente a la costa de Tanzania. La excelente técnica de esta fotógrafa queda fuera de toda discusión y cada una de sus imágenes son una ventana abierta que invita a penetrar sin prejuicios en la realidad de un continente en el que la mujer se representa a sí misma y a la realidad de su propia existencia.