Descripción de la Exposición
Después de haber sentido
Al convertirme en otras mujeres, hay una ruptura del yo para identificarme con las que sufren maltrato, pero se extiende silenciosamente hacia todas. Busco remecer, mostrar, mostrarnos. Me reconstruyo en ellas, les cedo mi cuerpo, perdiéndome en sus dolores que, inevitablemente, se funden con los míos.
Paola Ferraris
El propósito del retrato/autorretrato es inmortalizar a alguien y a su vez la imagen que vemos plasmada ya pertenece a su pasado. Es la paradoja de un instante volviéndose permanente. Esto se hace más evidente cuando se representa a mujeres cuyas existencias son frágiles porque viven inmersas en una situación de maltrato. Son cuerpos y rostros que mañana pueden estar desfigurados, o incluso no estar.
Las fotografías de mujeres, adolescentes y niñas desaparecidas o asesinadas, (generalmente sus últimos retratos) circulan por todos los medios, haciendo visible la tragedia. Personalizando en su imagen todos los femicidios cometidos y por cometer. El dolor de sus familias se hace colectivo. Ese instante perpetuado en un retrato o una selfie, se vuelve imagen símbolo de dolor para todo un país.
En los autorretratos de Paola Ferraris está implícito un juego irónico, porque la imagen de una mujer nunca fue ni será un simple retrato. Desde que los primeros artistas empezaron a representar el rostro o cuerpo femenino el objetivo fue mostrar un atractivo. Esta imagen, y también la mujer, se convirtieron en objeto de placer, posesión e intercambio. Ese juego perverso convirtió el mostrarnos en un mandato y la justificación de nuestra existencia en una cuestión de placeres ajenos. Las mujeres existimos para “gustar”, para que “nos elijan” y, lo que es peor, según nuestra belleza. Al criarnos como “objeto de elección”, asumimos que el poder es del que elige. Así también funciona para el hombre que, arrogándose ese poder de elección, se siente dueño.
Esta exposición habla de maltrato, de miedo, de frustración, de desolación, de castración, de la alienación de miles de mujeres, cuya vida está anulada por su pareja, cuya autoestima ya no existe, cuyo terror la paraliza. Habla de ellas, pero también de todas las demás: de las que fueron abusadas, violadas, asesinadas, así como también de las que viven discriminaciones y mutilaciones diarias en todos los grados. También de las que intentan rebelarse y de las que luchan para recuperar el poder para todas.