Nuestro idioma no posee más que una palabra para nombrar al desnudo, a diferencia del inglés donde naked designa a la forma humana natural del desnudo y nude al desnudo artístico. Por lo tanto hablaremos de desnudo para referirnos aquí a los productos elaborados por estos tres artistas Lavallén, Pallotini y Silberstein. Cada uno con su técnica y cada uno con el material pictórico elegido, representan este objeto icónico que una y otra vez, desde tiempos inmemoriales, y en todas las culturas, ha sido dibujado, esculpido tallado y pintado. Es que el cuerpo humano es fascinación, es sufrimiento, es belleza. Es símbolo de poder, de comunicación: las madonas italianas, los cristos sufrientes, Manet y su desnudo en el parque, o en Anita Ekberg surgiendo en la dolce vita de Fellini. Los sentidos del cuerpo: lo inédito que se podrá descubrir de la mano de estos artistas.