Descripción de la Exposición
Eduardo Cortils muestra una percepción de la naturaleza en la que se establece una conexión entre la materia viva, humana y la mineral. El hombre como sujeto-protagonista pasa a un segundo plano, siendo los personajes principales el tiempo, la gravitación o los agentes meteorológicos materializados como bosques, montañas plantas, agua y objetos abandonados. A través de ellos, el artista realiza un símil del ecosistema como sociedad uniendo las propiedades biológicas del ser vivo a las de los elementos, haciendo hablar a lo que no tiene palabra y haciendo callar a ese sujeto ausente, el ser humano del que hablar a Thomas Mann en su novela La Montaña Mágica.