Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- Unos contenidos de corte tan clásico como puedan ser los cuentos de los hermanos Grimm, pasados por el filtro de un artista adalid de la modernidad, con un punto de vista siempre original y con grandes dosis de humor, dan un resultado realmente sorprendente. Coincidiendo con el 200º aniversario de la primera edición de los cuentos de los hermanos Grimm, la Fundación Canal expone la serie de 39 grabados creados por David Hockney en 1969, inspirada en seis de los cuentos de los hermanos Grimm, y nos muestra una de las facetas menos conocidas de este prolífico artista, la de ilustrador-grabador. David Hockney está considerado no sólo como uno de los grandes mitos del arte del siglo XX, sino también uno de los artistas británicos más influyentes de todos los tiempos. Es un artista prolífico y polifacético que ha destacado en diversas disciplinas: pintura, fotografía, ilustración, dibujo y escenografía. Hockney se declara un enamorado de los cuentos, y especialmente los de los hermanos Grimm. En esta serie de grabados, realizados en 1969 y publicados en 1970, Hockney no pretende ilustrar de forma literal los cuentos, sino que ilustra con un punto de vista muy contemporáneo, original y grandes dosis de humor, escenas de los clásicos cuentos que por algún motivo le divierten o que ofrecen retos plásticos interesantes, e incluso en algunas de ellas aporta o prescinde de elementos, variando los pasajes sin por ello cambiar el significado de los relatos. También original en la selección de cuentos, elige para el proyecto aquéllos que menos veces han sido ilustrados. Si bien algunos son bastante conocidos en España como 'El enano saltarín', 'Juan sin miedo' o 'Verdezuela' (Rapunzel), nos encontramos con cuentos mucho menos presentes en nuestra tradición como 'El viejo Rinkrank', 'Piñoncito' o 'La liebre de mar'. El artista británico eligió estos relatos también por su simplicidad: 'Son pequeños relatos fascinantes, narrados en un lenguaje y estilo enormemente simple, directo y sin rodeos. Cubren un espectro bastante inusual de experiencias que va de lo mágico a lo moral'. David Hockney se implicó activamente en la creación del grabado por motivos prácticos. «Empecé haciendo obra gráfica en 1961 porque me había quedado sin blanca, no podía comprar pintura y en el Departamento de Arte Gráfico te daban los materiales gratis». Adaptándose sin problemas al medio del grabado, Hockney creó en aquel tiempo (1961-62) varios aguafuertes sobre el tema de El enano saltarín que sentaron las bases de su serie de 1969 de ilustraciones de cuentos de los hermanos Grimm. Durante el recorrido de la exposición, el propio Hockney nos explica en cada escena el porqué de su creación. Es revelador el profundo conocimiento que Hockney tiene de la tradición pictórica clásica, y en sus explicaciones no faltan alusiones a grandes artistas como Leonardo Da Vinci, Uccello, Carpaccio o Goya. Hockney combina de forma magistral tres técnicas de grabado -aguafuerte, aguatinta y punta seca- para dar un toque dramático o un punto divertido a cada ilustración y logra efectos asombrosos que demuestran sus dotes de grabador. El sorprendente diseño expositivo es obra de Enrique Bonet, que utilizando la luz y el color ha convertido la sala de exposiciones en un espacio que invita al visitante a dar un paseo por el mágico mundo de los hermanos Grimm visto desde el enfoque contemporáneo de David Hockney. I. PRESENTACIÓN DE LA EXPOSICIÓN David Hockney está considerado no sólo como uno de los grandes mitos del arte del siglo XX, sino también uno de los artistas británicos más influyentes de todos los tiempos. Es un artista prolífico y polifacético que ha destacado en diversas disciplinas, y en esta exposición demuestra sus extraordinarias dotes de grabador. Unos contenidos de corte tan clásico como puedan ser los cuentos de los hermanos Grimm, pasados por el filtro de un artista adalid de la modernidad, con un punto de vista muy contemporáneo, siempre original y con grandes dosis de humor, dan un resultado realmente sorprendente. Hockney se declara un enamorado de los cuentos, y especialmente los de los hermanos Grimm. En esta serie de grabados, realizados en 1969 y publicados en 1970, Hockney no pretende ilustrar de forma literal los cuentos, sino que ilustra escenas que por algún motivo le divierten o que ofrecen retos plásticos interesantes, e incluso en algunas de ellas aporta o prescinde de elementos, variando los pasajes sin por ello cambiar el significado de los relatos. También original en la selección de cuentos, elige para el proyecto aquéllos que menos veces han sido ilustrados. Si bien algunos son bastante conocidos en España como 'El enano saltarín', 'Juan sin miedo' o 'Verdezuela' (Rapunzel), nos encontramos con cuentos mucho menos presentes en nuestra tradición como 'El viejo Rinkrank', 'Piñoncito' o 'La liebre de mar'. La Fundación Canal organiza esta exposición coincidiendo con el 200º aniversario de la primera edición de los cuentos de los hermanos Grimm, cuyas compilaciones han salvado del olvido los relatos que han formado parte del acervo cultural de tantas generaciones. II. CONTENIDO DE LA EXPOSICIÓN '...Todas nuestras ideas acerca de la realidad y la representación están cambiando constantemente.' David Hockney David Hockney se implicó activamente en la creación del grabado desde el inicio de su carrera. Y lo hizo por motivos prácticos. Como el propio artista cuenta: «Empecé haciendo obra gráfica en 1961 porque me había quedado sin blanca, no podía comprar pintura y en el Departamento de Arte Gráfico te daban los materiales gratis». Adaptándose sin problemas al medio del grabado, Hockney creó en aquel tiempo (1961-62) varios aguafuertes sobre el tema de El enano saltarín que sentaron las bases de su serie de 1969 de ilustraciones de cuentos de los hermanos Grimm. Gran amante de los cuentos infantiles, Hockney había leído los ciento veinte cuentos escritos por los hermanos Grimm, admiraba las primeras ilustraciones de los cuentos, y en 1969 decidió crear sus propias imágenes. Más que ilustrar de forma literal los cuentos, optó por crear grabados de gran viveza en los que condensaba una atmósfera o un detalle. De los cuentos, le gustaban muy especialmente los elementos mágicos, y sus imágenes se dirigen a responder imaginativamente a las descripciones del texto más que a intentar centrarse en los sucesos más importantes de la narración. Se trata de algo más que de simples ilustraciones, constituyendo, por sí mismas, imágenes no dependientes de las narraciones. Hockney aborda los cuentos con un enfoque contemporáneo y a menudo humorístico, eligió también estos relatos por su simplicidad: 'Son pequeños relatos fascinantes, narrados en un lenguaje y estilo enormemente simple, directo y sin rodeos. Cubren un espectro bastante inusual de experiencias que va de lo mágico a lo moral'. En un primer momento seleccionó trece historias que habían encendido su imaginación. Sin embargo, tras crear once grabados para 'Juan sin miedo', Hockney comprobó enseguida que el proyecto se estaba volviendo inabarcable y acabó reduciendo a seis el número de relatos a ilustrar. El objetivo de David Hockney al elegir estos seis cuentos de los hermanos Grimm fue aportar un punto de vista inédito y original representando algunos de los relatos que menos se habían ilustrado hasta entonces. Hockney y su asistente Maurice Payne prepararon un taller de grabado y durante prácticamente un año se dedicaron en serio al proyecto, produciendo cerca de ochenta grabados de los que treinta y nueve fueron publicados y son los que componen esta exposición. En aquella época el grabado tenía gran importancia para él. Hockney realizó esta serie pensando siempre en hacer una publicación. El libro, que contiene los seis cuentos ilustrados con los 39 grabados hechos por Hockney, fue diseñado con los grabados incorporados al texto. Adicionalmente, se produjo una versión fotográfica en miniatura que se vendió por aproximadamente dos dólares y alcanzó tal popularidad que se imprimieron sesenta mil copias. Hockney comentó: «... la idea de que cuarenta mil personas puedan permitirse ese pequeño libro me gusta mucho. Descubrí que los niños lo adoraban por su tamaño; sus manitas se mostraban encantadas con la idea; se corresponde con su escala. Creo que es una equivocación que los libros infantiles tengan el mismo tamaño que los de los demás». Resumiendo sus vivencias ilustrando a los Hermanos Grimm, Hockney escribió: «Esos grabados acabaron convirtiéndose en algunas de mis piezas más famosas. Se trata de un trabajo 'importante' por el largo tiempo -casi un año- invertido en crearlos, sólo en el aspecto artístico. Si trabajas en una pintura durante un año la consideras una pieza importante». III. LOS CUENTOS DE LOS HERMANOS GRIMM Jacob Grimm (1785-1863) y Wilhelm Grimm (1786-1859 publicaron gran parte de los cuentos populares que conocemos, cuyo origen son leyendas y relatos con moraleja transmitidos de generación en generación. Los hermanos Grimm no escribieron los cuentos, pero tuvieron el mérito de recopilarlos, editarlos y publicarlos, salvándolos del olvido. El primer grabado de la sala, hecho en aguafuerte y aguatinta, es un homenaje a Catherina Dorothea Viehmann, la anciana que contó la mayoría de los cuentos a los hermanos Grimm. El retrato, inspirado en un dibujo hecho por Emil Ludwig Grimm, el hermano menor de los Grimm, Hockney ha querido destacar la importancia de la mujer que ha sido la principal fuente de información de los recopiladores de los cuentos. El origen de los recopilatorios de cuentos El primer libro de cuentos que se conoce es del italiano Giovanni Francesco Straparola, quien publicó entre 1550 y 1553 'Las noches agradables', que reunía setenta y cuatro cuentos compilados, entre ellos 'El gato con botas'. El también italiano Giambattista Basile fue el responsable de dos volúmenes de cuentos titulados 'El cuento de los cuentos o el entretenimiento de los pequeños', publicados con carácter póstumo en 1634 y 1633, entre estos cuentos las primeras versiones de La Cenicienta, Rapunzel, La Bella Durmiente y Hansel y Gretel. Caperucita Roja llegó de la mano del francés Charles Perrault, cuento incluido en la recopiliación de 'Historias y cuentos del pasado con moraleja: Los cuentos de la mamá Gansa' publicados en 1697. Con la primera edición de 1812 de 'Cuentos para la infancia y el hogar', que contenía ochenta y seis historias, los hermanos Grimm iniciaron una búsqueda literaria que culminó con la séptima edición publicada en 1857 que incluía doscientos once cuentos.
La exposición alberga 39 grabados creados en 1970 por el polifacético artista David Hockney (Inglaterra, 1937), que ilustran seis cuentos de los hermanos Grimm: Rapunzel , Juan Sin Miedo , Rumplestiltskin , El Enano Saltarín, El viejo Rinkrank , El Lebrato Marino y Piñoncito ; los cuales exaltan valores como la constancia, la astucia, la valentía, el compañerismo, la libertad o el amor.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España