Descripción de la Exposición
Los grupos sociales construyen la concepción de su realidad a través de narrativas hegemónicas que explican su condición. Dichas narrativas suelen ser binarias, colonizados contra colonizadores, piadosos contra infieles, lo natural frente a lo artificial, lo íntimo frente a lo público, la mujer en oposición al hombre. Al idear oposiciones distintivas para explicarnos el mundo, les humanes hemos creado discursos simplistas que sólo muestran una perspectiva, casi absoluta, de nuestra realidad. Una de estas narrativas hegemónicas es la de la separación entre la naturaleza y la humanidad que se discute en la obra de Aleph Escobedo donde se plantea la necesidad de volver a crear una conexión entre las partes. Al encontrarnos dentro de la naturaleza nos reconocemos en su complejidad. Y es que la realidad no es binaria, es más bien una interacción de redes que se unen de formas distintas. Y estas constituyen espacios de intersecciones intricadas que las narrativas sociales hegemónicas han buscado obviar e invisibilizar, así creando dinámicas de poder. Es en esos espacios de intricada complejidad donde se encuentra la sustancia de la realidad humana. Es ahí donde cabe el sincretismo religioso al que hace alusión la obra de Sula Bermúdez Silverman al idearlo dentro de un tercer espacio que cuestiona una normatividad binaria establecida por medio de dinámicas de colonización. O la coexistencia entre lo espiritual y lo científico que expresa la obra de Samuel Guerrero. Al reconocer que hay una realidad que vas más allá de categorías hegemónicas normalizadas se abre un espacio para entender todo lo que queda afuera, lo raro, lo cuir. Así, la obra de Berenice Olmedo cuestiona la idea de que exista una forma física humana natural y propone que ésta es más bien diversa. De esta manera, nos abre lo ojos a un contra-discurso que alude a la complejidad humana. Y es en el crear un discurso alterno –como lo hicieron las mujeres Negras lesbianas y feministas interseccionales del Combahee River Collective en 1977 al identificar la opresión que vivían dentro de la sociedad estadounidense como mujeres racializadas y sexualizadas—donde entendemos la complejidad/diversidad/no-binariedad de los grupos sociales. Es en las narrativas alternas donde se encuentra el acto de resistir. Naomi Rincón Gallardo lo demuestra en su pieza audiovisual Sangre Pesada, donde escuchamos una voz femenina narrar las vivencias del extractivismo capitalista como en carne propia, seguida de un ensamble musical que celebra la vida en colectividad. La alegría compartida se presenta como una acción de resistencia ante el despojo y la violencia. Además, como nos hace ver Mina Squalli-Houssaïni la resistencia no siempre es pública, en ocasiones es íntima, doméstica, se expresa en espacios cotidianos de la vida diaria. Es al cuestionar las narrativas hegemónicas que encontramos nuevas formas de entender la realidad y al resistirlas reconocemos y construimos contramundos.
-Emilia Cordero Oceguera
Exposición. 17 dic de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Picasso Málaga / Málaga, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España