Descripción de la Exposición
Los contendientes creados por Guadalupe Ayala tienen varias cualidades que hacen que esta ficción nos haga pensar en situaciones de la vida contemporánea.
Para empezar, su construcción tiene características estéticas que me llamaron la atención: una be¬lleza que tal vez tenga que ver con un dominio de los materiales, sobre todo del color, de las relaciones entre los colores, que inevitablemen¬te me llevan a la frase de Miguel Ángel Pareja, refiriéndose a la pintura como "el drama de la vida pintado con colores".
Por otro lado, estos robots programados para destruirse tienen un aspecto que puede asociar¬se a las dos posturas dominantes en el mundo contemporáneo: a un lado, el fundamentalismo religioso de aquellos que «saben» que al inmolar¬se por la causa accederán a una cierta cantidad de vírgenes en un supuesto paraíso y, al otro, el descreimiento absoluto y cínico del capitalismo salvaje y su principal herramienta: el consumo. En ambos casos, basta con haber leído un par de manuales tipo Psycholgy for dummies para advertir que detrás de ese accionar encontramos a la "pul¬sión de muerte" o "goce", según los lacanianos.
Está claro que a estos seres no hay que advertirles que no se detengan a leer acerca del pensamiento débil de Vattimo ni sugerir¬les que sigan las recomendaciones de nuestro expresidente Mujica respecto a no meterse en el "viru-viru" de las humanidades y ponerse a hacer algo con las manos (bueno, las creatu¬ras de Guadalupe no tienen manos) o, yendo un poco más lejos, como en Japón, pedirles que dejen de impartir clases o disminuir los cursos de Ciencias Sociales y Humanidades a raíz de un decreto ministerial que ordena a las facultades solo "servir en áreas que llenen mejor las necesidades de la sociedad".
Es posible que la contemplación de esta contienda nos haga cuestionar las cosas que hacemos como seres programados, que nos lleve a pensar que todos lo somos y nos con-duzca a preguntarnos lo que realmente quere¬mos hacer. Algo como el "Don't act, just think" (no actúes, solo piensa), de Slavoj Žižek. De alguna manera, si nos ponemos en el lugar de los contendientes podemos concluir que, cual¬quiera de estos seres, al decir de The Beatles: "Doesn't have a point of view/Knows not where he's going to/Isn't he a bit like you and me?" (No tiene un punto de vista / no sabe hacia donde va / ¿no es un poco como vos y yo?)
Por lo menos a nosotros nos queda la posibilidad de hacer lo que queremos, que suena muy fácil, pero que lo normal es que te lleve toda la vida.
Santiago Tavella
Músico, artista visual, curador
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España