Descripción de la Exposición
El 12 de noviembre, desde las 19,00 horas, Rosalía Banet presenta en Twin Gallery la exposición "Constelaciones dismórficas", una reflexión sobre el ser humano dentro de un mundo cada vez más deshumanizado y alienador, un sistema que nos hace vivir en permanente conflicto y desequilibrio con nuestra esencia y entorno.
El proyecto está formado por una instalación para la que la galería ha cambiado su estética habitual, blanca y neutra, para pasar a un negro absoluto. Sobre estas paredes la artista plasma un simulacro de universo humano que representa un mapa celeste nocturno en el que la mirada ha sido invertida: ya no señala hacia arriba, no muestra el exterior, sino todo lo contrario, es una mirada a lo interno, a lo propio y cercano. Una mirada que enseña nuestra pequeñez pero al mismo tiempo nuestra inmensidad, comparable al universo. Es por tanto una mirada holística, que todo lo relaciona, que va desde lo individual a lo espacial, de lo conocido a lo desconocido, de lo cercano a lo lejano. Este gran paisaje nocturno está compuesto por 250 constelaciones humanas, dibujos sobre papel de diferentes tamaños, con fondo negro, sobre los que se dibujan las luces de pueblos, ciudades y urbanizaciones a modo de constelaciones.
Las constelaciones que aparecen en estos mapas nocturnos tratan de parecerse a las constelaciones estelares, aunque en su intento no hacen sino evidenciar la diferencia y constatar su artificialidad. Las constelaciones de estrellas que vemos en el cielo parecen tener una posición invariable, de hecho podemos comprobar cómo astrónomos de diferentes épocas y lugares señalan las mismas formaciones estelares; mientras que estas constelaciones humanas están en permanente cambio, sometidas al vaivén humano (financiero, político, ideológico, etc.). Son constelaciones que dibujan mapas en la oscuridad, que van desde zonas rurales a grandes urbes, pasando por urbanizaciones, pueblos y otros tipos de asentamientos humanos. Para su realización ha sido necesario llevar a cabo numerosas excursiones al anochecer a lo largo de casi un año, con el fin de fotografiar estos lugares, para después dibujarlos sobre el papel, en forma de cartografías nocturnas.
"Todo lo que hacemos deja una impronta, por eso el hecho de que el proyecto haya tenido un proceso de realización extendido en el tiempo, así como la implicación personal necesaria en esta búsqueda de lugares, posiciona la obra dentro de una proporción claramente humana, lejos de la dimensión globalizadora y controladora que nos ofrece Google Maps u otras aplicaciones de Internet, que parecen convertir al hombre en un semidiós y al mundo en su pequeño juguete. Por otro lado, trabajar desde la vivencia propia ha dotado al proyecto de un contexto personal, reflejo del entorno real que habito.
Así, el trabajo de campo y desarrollo del proyecto suponen una relectura del entorno conocido, que al ser focalizado desde un punto de vista distinto, nos muestra un mundo diferente dentro del que nos era tan conocido y familiar, redescubriéndolo y redibujándolo", Rosalía Banet.
Esta instalación se completa con una serie de esculturas en forma de planetas enfermos, que cuelgan del centro de la galería. Así, de este cielo oscuro repleto de estrellas cuelgan esferas enfermas, a modo de planetas, que simulan ser de piel: dermis con infecciones, pruritos y otras alteraciones cuyo origen no se haya sin embargo en la superficie sino en el interior. Son enfermedades que se sitúan concretamente en el cerebro, pues todas ellas son psicosomáticas, que surgen de la exteriorización de un proceso mental, de un conflicto interno. Enfermedades que, en este proyecto, simbolizan el signo de nuestro tiempo, un tiempo confuso dentro del cual el ser humano se agita entre la obsesión, la dispersión y la desidia. Rastros corporales, fragmentos enfermos que aluden a la fragilidad, que muestran la vulnerabilidad del ser humano dentro del sistema que habitamos.
La exposición se completa con un pequeño gabinete de dibujos que bajo el título de "Sangre", reflexiona en rojo sobre el ser humano dentro de la sociedad actual. Indaga en nuestras inquietudes, miedos, dudas, deseos, etc.
ROSALÍA BANET
Madrid, 1972. Doctora en Bellas Artes por la Universidad de Vigo en 2003. En 1997 participa en La Muestra de Arte Joven y en Circuitos de Artes Plásticas. Tras su primera exposición individual en la Galería Marta Cervera, en la que ya reflexiona sobre el tema de la comida, en el año 2000 comienza a trabajar con la Galería Espacio Mínimo, con la que expone individualmente en cuatro ocasiones y participa en ferias internacionales como ARCO, Frieze, Artisima, Art Chicago, Volta, etc. En estos años trata temas bastante duros en los que, sin recrearse en la sangre y las vísceras, utiliza éstas como símbolos del dolor y el sufrimiento. Poco a poco su obra se vuelve más interdisciplinar.
Exposiciones importantes de Rosalía Banet han sido: Beefcakes, Galería Espacio Mínimo (2000), que tuvo una segunda parte en San Francisco, en la Galería Catherine Clark, donde presenta Wedding Day. Cómeme, cómeme y Carnicería Love, Galería Espacio Mínimo, (2004 y 2008), La Fábrica de Conservas Agridulces, Centro de Arte La Conservera en Murcia y Las siamesas Golosas, en el Museo de Bellas Artes de Santander, ambas en el año 2009.