Descripción de la Exposición
Las flores que se presentan en esta exposición se sitúan en un mundo entre el real y el imaginado. En muchos de sus lienzos, la pintora Loreto Bayo no pretende imitar las flores reales sino que, haciendo referencia a los bordados de los mantones de manila, desarrolla una simbología propia.
En esta serie de obras, la flor bordada es sacada del contexto del mantón para verse aislada en el lienzo; la artista recurre en cada caso a multitud de experimentaciones de formas y colores para finalmente contemplar el valor estético de cada nueva creación. Con cada nuevo proyecto nace una nueva flor con un carácter propio, de ahí que tengan especial valor los nombres que la autora le otorga a cada una de esas flores, añadiendo aún más personalidad a sus pinturas.
Pareciera que Loreto construyese cada una de sus obras procurando la máxima complejidad de entramado posible, como si quisiera atraer a los espectadores hacia sus cuadros tal como las flores atraen a las abejas. El objetivo de cada pieza sería entonces ser lo más llamativa y armónica posible para cautivar la mirada del “espectador-abeja”. El uso de colores brillantes, flúor y destacados contrastes entre el objeto y el fondo son recursos que contribuyen a esta misión, el atraer la mirada hacia el centro de la composición y conseguir así, que el espectador se vea inmerso hasta el fondo de cada flor.
La creación no es únicamente pictórica en esta exposición. La colaboración de la poetisa Graciela Escudero suma un valor lírico excepcional. Sus poemas, inspirados en las obras Loreto, crean un diálogo artístico sublime al presentarse juntos, un ejemplo de gran maestría de cómo entrelazar dos disciplinas artísticas.
Álvaro Bayo Neira. Historiador del Arte