Descripción de la Exposición
Un total de doce obras componen la primera muestra individual que presenta en la Galería Metro de Santiago de Compostela uno de los artistas más reconocidos del panorama artístico, el asturiano Guillermo Simón (Villaviciosa, 1968). Óleos sobre aluminio que se agrupan bajo el título CON El MAR EN LA MIRADA y que son una continuación a la serie Latidos de mar de su reciente exposición en Palma de Mallorca.
El mar, la mirada, el silencio y la contemplación son el eje que vertebra esta nueva serie donde se fusiona acantilado, agua, desprendimiento, caída y precipitación. Una especie de abismo sobre la piel del agua, donde el tiempo fluye como un mar en el que todo se diluye.
En la pintura de Guillermo Simón existe un especial interés por la evocación más que por la representación, hay siempre una invitación a la memoria del espectador para que cada cual pueda extraer interpretaciones diferentes. Esta colección está inspirada en los acantilados de la costa asturiana, donde los accidentes geográficos y geológicos no son mas que una apariencia que nos muestra el alma del paisaje.
La observación de los acantilados se traduce en una geología abstracta protagonizada por la mancha, la luz, la sombra y el claroscuro, en una especie de energía licuada. De alguna manera estas pinturas evocan los misterios de las fuerzas indomables de la naturaleza y son testigo pictórico y expresivo de todo aquello que no se puede expresar con otros medios: el correr del aire, el ondular del mar, el temporal que impulsa el embate de las olas contra el acantilado, la tensión entre lo que surge, lo que desaparece y lo nuevo que aparece.
Sin embargo el verdadero motivo de la pintura de Guillermo Simón no es el mar y los acantilados de su Cantábrico vital, sino la propia pintura. Todo lo demás es la máscara que justifica el lenguaje propio de la pintura, que es autónomo e independiente. “Mis pinturas son una metáfora de la fugacidad, del estallido de una ola, de lo imprevisible, de la importancia del azar en la pintura y en la existencia, de lo irrepetible de cada instante”, explica el artista.
Guillermo Simón se licenció en 1991 en la Facultad de Bellas Artes de Bilbao, ampliando más tarde sus estudios en la Ecole Nationale Superieure des Beaux Arts de Paris. Tiene en su haber una densa trayectoria expositiva en reconocidas galerías de arte y museos, tanto a nivel nacional como internacional, y ha sido galardonado a lo largo de su carrera con prestigiosos premios de pintura.