A pesar de ser la parte más desconocida de sus fondos, el CA2M Centro de Arte Dos de Mayo contiene una importante cantidad de obra gráfica. Esta representa su segunda colección más numerosa, después de la de fotografía. Aun así, es objeto de una visibilidad expositiva menor, y eso que cuenta con obra seriada firmada por grandes referentes del arte contemporáneo.
Con la intención de plantear acercamientos a la colección de manera diferente, el CA2M ha invitado al artista Oriol Vilanova a intervenir en la parte de obra gráfica. Un artista cuyo trabajo basa su estrategia conceptual en la reflexión sobre el coleccionismo, su orden y las formas de exponerlo. A través de una metodología de trabajo centrada en la recolección y documentación de imágenes, propone el archivo como deconstrucción del relato único del pasado, considerando al museo tradicional un espacio expositivo en desuso, e implicando su replanteamiento como lugar necesario...donde reconsiderar las prácticas y narrativas establecidas.
Oriol Vilanova, de formación arquitecto y residente en Bruselas, nos propone varias intervenciones que trastocan nuestra forma de concebir una muestra de colección. La primera consiste en una arquitectura armario que recoge toda la obra gráfica del CA2M en el menor espacio posible para ser mostrada, una suerte de épico gabinete de curiosidades. La segunda intervención, antagónica a la anterior, se presenta como una instalación donde se recopilan vitrinas vacías de diferentes museos madrileños que, por ausencia, nos hablan de sí mismos.
Oriol Vilanova (Manresa, 1980) vive y trabaja en Bruselas. Los rastros y los mercadillos son sus espacios predilectos de investigación, gracias a los cuales ha construido una colección de postales que usa como “máquina de pensar” y que se ha convertido en base conceptual para sus obras de teatro, instalaciones y performances.
Entrada actualizada el el 25 sep de 2018
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