El claroscuro es el contraste acusado entre la luz y la sombra en una pintura, o el aspecto que confiere la escritura mediante la combinación de los trazos con distinto grosor de las letras; y es también el conjunto de rasgos contradictorios de una persona o de una situación. Atendiendo a las acepciones de su propia definición, Chiaroscuro es contraste, combinación y contradicción. Cada imagen abre una singular experiencia estética del contraste entre luces y sombras que se combina al unísono con la imagen cuyos rasgos compositivos la contradice. La naturaleza fragmentada se extiende en la dualidad, el resultado es una amalgama que da cuenta de la correspondencia antónima y arbitraria en sus formas, en las realidades que la componen y que tienen como denominador común el juego tiránico entre la luz y su sombra.