Descripción de la Exposición Todo artista que trabaja en la naturaleza no ha de interesarse, necesariamente, por el paisaje (G. Tiberghein). Después del Land Art, varios artistas exploran artísticamente las posibilidades de la naturaleza, descubren nuevos métodos y valorizan ecológicamente el planeta. Christina Oiticica forma parte de estos artistas que innovan y que bifurcan su interés en unas investigaciones nacidas de una necesidad real de que el arte interactúe con el ser humano y con el medio ambiente. Consecuentemente, Oiticica ideó un procedimiento que consistió en enterrar sus lienzos (telas vírgenes o pintadas) en los bosques de los Pirineos (Francia) y desenterrarlos en las distintas estaciones del año. La exposición '4 estaciones' pasó por Lujbliana, Roma, París y Río de Janeiro (Casa Brasil-Francia). Su siguiente paso, en los años 2004 y 2005, fue usar como base la selva amazónica. Como consecuencia de la humedad del ambiente, el resultado fue completamente distinto al producido por la naturaleza de los Pirineos. Entre 2006 y 2008, Christina eligió el Camino de Santiago, lugar sagrado y simbólico que recibe peregrinos de todo el mundo, adoptándolo como taller. La artista compuso sus telas en diferentes lugares del Camino aprovechando el relieve de las piedras, la intervención de la lluvia y de la nieve, el color de la tierra, pigmentos naturales y cera. Una vez realizadas, las obras fueron 'plantadas' en la tierra y recuperadas meses después. De ese original proceso, emergieron telas simbólicas y abstractas que captaron la energía del lugar donde fueron depositadas. De esta manera, la artista celebra el renacimiento de la alegría de encontrarse en este planeta, festeja el arte-ecología y se recrea con las nuevas vibraciones de la tierra. Sus flores, bocas y corazones, atestiguan la emoción del misterioso proceso creativo. El resultado de todo ese trabajo, que también se recogió en un libro editado por la Fundación Vía Galego, ya ha podido verse en las diversas exposiciones itinerantes que la artista viene realizando desde 2006 por el propio Camino de Santiago. El pasado 13 de mayo, Oiticica llegó con sus cuadros a Santiago de Compostela, donde la exposición 'Camino Peregrino' abrió sus puertas al público en la Iglesia de la Universidad, un espacio dedicado en la actualidad a las artes. La exposición, además de exhibir los mejores cuadros de la artista, también mostró fases de todo el proceso de trabajo: una peregrinación de dos años y más de cien telas enterradas se reflejan a través de fotos, diarios y un pequeño documental. Éxito absoluto de público (en apenas dos semanas la exposición batió el record de visitas del espacio), Oiticica muestra que su trabajo es realmente peregrino y que Santiago no acabó siendo el final del Camino: la artista llega ahora a la capital de España, donde va a inaugurar la exposición 'Camino Peregrino'.