Decía Nietzsche cosas que ya sabían los sabios antiguos y cosas que hoy se empeñan los neurocientíficos en cercar mediante estudios de esos que descubren lo que siempre se ha sabido. Decía Nietzsche entre otras muchas cosas de sabio errante que un día sin danzar es un día perdido. Podría haber dicho Nietzsche pero no lo dijo que la danza es una actividad capaz de ponernos cada vez, una vez más, por siempre jamás, en el punto de partida. Parir-partir-irse partido. Poética del comenzar.
Danzar significa observarse desde fuera, prestar atención a las sensaciones, dar una respuesta no mediada por la razón sin juicios ni prejuicios, asombrarse de uno, hacerse el caso justo, quitar las alfombras para limpiar por debajo, entrar en contacto con el misterio, entregarse al devenir y sobre todo: no-ser, no-ser, no-ser. La identidad estrecha el mundo porque pone coto a la potencia. Ser humano es una pérdida...de tiempo y el humanismo necesita ser revisado en la práctica a fondo. Danzar es una experiencia concreta de ser y de pensarse en relación. Danzar es una actividad política que no lleva la etiqueta de política. Danzar es subversivo y popular y mientras se baila no se habla. Danzar es entrar en contacto con el misterio de ser movidos por lo otro. Danzar es ser en bruto.
Este curso 2023-2024 abrimos espacio de investigación de movimiento. Nacemos-partimos a compartir lo que sabemos todavía y lo que no sabemos aún. Un fin de semana al mes exploraremos juntos e intensivamente maneras de caer, caer, caer, soltar, soltar, soltar, no-ser, no-ser, no-ser, danzar, danzar, danzar.
Entrada actualizada el el 01 ago de 2023
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