Abrir un nuevo espacio, reformar un proyecto anterior, pensar el arte como actitud... Todo ello implica, sin duda, plantear cuestiones continuamente para decidir cómo presentarse en nuestro contexto más cercano, trabajando y elaborando una declaración de intenciones en la que tuvieran cabida todos los actores de un mismo guión.
¿Qué significa hacer una colección? ¿Cómo nos situamos ante el arte? ¿Cuales son las formas académicas de la creación? ¿Donde están sus límites? Estas preguntas se formulan, incansablemente, desde el ámbito curatorial, pero también desde el coleccionismo en el mercado del arte.
Por ello, Cibrián Gallery ha querido hacer una declaración de intenciones con esta exposición: por un lado, apostando por artistas que se atreven a deconstruir y cuestionar los límites de las formas académicas. Por otro lado, también mostrando cómo se puede acceder al arte de manera cotidiana, realizando una selección que bien pudieran confirmar una colección, bilduma, particular.
La selección de artistas...está marcada por un deseo de contextualizar ciertas prácticas pictóricas que han sabido ir más allá y replantear la forma de tratar la pintura, con otras, más cercanas, que han podido llegar a conclusiones y prácticas similares desde contextos muy diferentes.
Por ello, esta exposición, muestra artistas con lenguajes propios y cercanos como Gerard Ritcher, Tauba Auberchach, o Angela de la Cruz, Wade Gyton, Marie Mul, y Magali Reus, acompañando a artistas como José Ramón Amondarain, Nagore Amenabarro, Iñaki Gracenea y Manu Muniategiandikoetxea.
Creemos que con ella se puede apreciar lo que será el programa del galería a partir de ahora, haciendo hincapié en el contexto local, con profunda mirada a los artistas internacionales.
Entrada actualizada el el 14 ene de 2019
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