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La exposición que organizan el CBA y la SECC, Espejos en la Niebla, es la última propuesta audiovisual de La Linterna Mágica –taller de Basilio Martín Patino-. Su temática entrelaza territorios salmantinos a lo largo del siglo XX, postulando un contraste dialéctico entre El Cuartón, la finca de los Luna Terrero -familia de oligarcas terratenientes-, y los solitarios terruños de Centenares, el reducido poblado que hubieron de construir los numerosos renteros, emparentados entre sí, que fueron obligados a marcharse de la dehesa de El Cuartón, con todos los familiares, ganado y bártulos propios, ... de un día para otro.

Esta arriesgada experiencia, narrada por Macu Vicente en su libro Centenares, se afronta mediante una serie de proyecciones simultáneas y diferentes, efectuadas dentro de una serie de celdillas de cristal, independientes, cada una de las cuales aporta su particular faceta temática desarrollada como parte de todo el conjunto o laberinto de opciones donde el espectador-colaborador puede, según sus criterios de valoración, complementar, rechazar, optar, preferir, alterar, combinar, suplir…

El resultado es una lectura crítica del pasado que parte de un caso particular, de una mirada macrohistórica, para tratar de arrojar luz sobre las tensiones socioeconómicas y culturales que aquejaron a la España del primer tercio del siglo veinte.

La muestra es por tanto el fruto de la investigación y la búsqueda de nuevas formas expresivas, un compromiso activo con el espectador y una lectura crítica del pasado de España. Rasgos que han convertido a Patino en una figura central de nuestro cine.

Basilio Martín Patino

Verdadero pionero en España de la ensayística cinematográfica, su cine es un continuo cuestionarse a sí mismo, en la medida en que cada pieza parece estar formando parte de un mosaico agrietado que no esconde su condición de artificio. Sus experimentaciones en torno al documental de compilación y el falso documental comienzan por acopiar series de archivos audiovisuales que yacían en filmotecas para operar sobre ellos. Patino redefine un tratamiento del montaje transgresor, iconoclasta y muy personal.

Basilio Martín Patino (Lumbrales, Salamanca, 1930), gana el Premio Nacional en 1961 con su primer guión cinematográfico, Amanecida. En 1966 realiza Nueve Cartas a Berta. Concha de Plata en el Festival de San Sebastián, entre otros premios. En 1971 Canciones para después de una guerra. Continúa su labor cinematográfica en los años 80 y 90, y en 2002 realiza Octavia, seleccionada por el Festival Internacional de Cine de San Sebastián, el London Film Festival, el Festival de Roma, y presentada en muestras de cine en Canadá, EE.UU, Australia y Latinoamérica.

En 2004 y 2005 realiza los audiovisuales Homenaje a Madrid, sobre los atentados del 11M, proyectado en la exposición La seducción del caos: documento y ficción en la obra de Basilio Martin Patino; Corredores de fondo, para el pabellón de España en la Bienal de Arquitectura de Venecia; y Fiesta, para el pabellón de España en la Exposición Universal de Aichi, Japón.

La Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España le hizo entrega de la Medalla de Oro 2005 “en reconocimiento a una obra que representa los valores imperecederos de la apuesta por un cine inteligente, complejo, e inmerso en la realidad y la evolución de un país”.