Durante los últimos diez años, Abraham Cruzvillegas (ciudad de México, 1968) ha concentrado su práctica, en analizar y utilizar el ingenioso, azaroso y precario método de construcción que frecuentemente se emplea en las áreas periféricas de las grandes ciudades de Latinoamérica, denominado “autoconstrucción”. Este concepto ha dotado al artista de una línea flexible de maniobras artísticas, sociales e históricas a través de las cuales esparce sus ideas. Para él las piezas son una metáfora de la identidad en las que se refleja una esperanza constructiva: En mi obra, la transformación de información, materiales y objetos compone también la inacabada construcción de mi propia identidad como una aproximación a la realidad a través de hechos.
Para “Autoconfusión”, Cruzvillegas nos cuenta sobre su experiencia en Panamá, a través de su herramienta en el reconocimiento de este terreno con tantas capas, y tanta carga emocional, económica, afectiva, política, social e histórica. Al final, ha...acabado teniendo más preguntas que conclusiones y ha llegado a generar una estructura fincada solamente en dudas . Esa estructura tal vez se ha desproporcionado en su escala con la dimensión no solamente geográfica del asunto en cuestión, sino de su brevedad ontológica : el aquí y el ahora.
* Con la colaboración de la galería Kurimanzutto (Ciudad de México).
Entrada actualizada el el 23 oct de 2016
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