Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- La Obra Social 'la Caixa' y el Museo de Arte Contemporáneo (MAC) Gas Natural Fenosa presentan esta selección de alrededor de 50 esculturas y dibujos realizados por Ángel Ferrant entre 1939 y 1958, pertenecientes en su mayor parte a la Colección de Arte Contemporáneo Gas Natural Fenosa. La muestra pretende ser al mismo tiempo índice y resumen de la escultura de vanguardia internacional, matizada por la extraordinaria aportación creativa de uno de los principales escultores españoles del siglo xx. Concebida como un gabinete de trabajo que permite un acercamiento directo e íntimo al universo gráfico y escultórico de Ángel Ferrant, la selección tiene como objetivo realizar un recorrido por los desarrollos más relevantes de la forma llevados a cabo por el artista. La exposición se articula en base a cinco aspectos o bloques temáticos con los que Ferrant trabajó a lo largo de su vida: el naturalismo y la tradición de la estatua, el cuestionamiento del canon y la apertura de la escultura, la capacidad interpretativa de las cosas y las formas, la conjunción de los elementos y, por último, la separación de los elementos, de la madera y del hierro. El diálogo que se establece entre esculturas y dibujos permitirá al espectador comprobar cómo las intuiciones creativas de Ferrant no se dieron como búsquedas resueltas en periodos cronológicos cerrados, sino como planteamientos cíclicos. Sus ideas plásticas aparecen y reaparecen a lo largo del tiempo, pasando de piezas a dibujos que, a su vez, remiten en ocasiones a propuestas anteriores, en un proceso abierto de libertad experimental. Comisariada por Carmen Bernárdez Sanchís, doctora en Historia del Arte y profesora de Arte Contemporáneo en la Universidad Complutense de Madrid, la exposición estará abierta al público en CaixaForum Barcelona hasta el próximo 28 de octubre. Ángel Ferrant (1890-1961) es uno de los grandes nombres del arte de vanguardia de nuestro país. Nació en Madrid, estudió en la Escuela de Artes y Oficios y en la Academia de San Fernando, viajó por Europa y estuvo en París, donde entró en contacto con las tendencias más avanzadas del arte de su tiempo. La obra de posguerra de Ferrant es extraordinariamente coherente con estos orígenes: los mismos temas y formas le acompañaron toda la vida. Sinceridad, honradez, el amor por el oficio arraigado en la tradición artesanal y un espíritu experimental que le llevaba a explorar los límites de la experiencia artística son elementos básicos de una personalidad que no puede ser interpretada de forma lineal. El año 1939 supuso para el arte de nuestro país la imposición de formas académicas y cánones clásicos. Sin embargo, Ángel Ferrant nunca renunció a la tradición popular ni a las experiencias de las vanguardias, y buscó nuevas formas de representar la figura humana mediante un compromiso entre naturalismo y abstracción. En el universo creativo de Ferrant las formas no provienen necesariamente de la realidad, ni del canon clásico del arte, ni del inconsciente. Todos estos referentes se mezclan cuando la viva imaginación del artista empieza a descubrir asociaciones entre las formas de la escultura y los objetos del mundo. Muchos de los dibujos y esculturas de Ferrant de los años cincuenta están inspirados en asociaciones secretas de la imaginación que reconoce figuras humanas en objetos cotidianos y en formas de la naturaleza. La obra de Ángel Ferrant también juega con elementos complementarios que se confrontan o enlazan en formas geminadas o desdobladas. Es lo que el propio artista denomina conjunciones, donde plantea la ruptura con la idea de la escultura como unidad cerrada y evoca nociones metafísicas sobre la complementariedad de los principios vitales en los organismos vivos. Su experimentación con la escultura es continua, proponiendo separar los elementos y recolocarlos para obtener esculturas variables y cambiantes. En la etapa final de su trayectoria, Ferrant construía obras con piezas metálicas de distintos tamaños y perfiles que forjaba, encajaba y soldaba. Además, cedió al espectador la posibilidad de manipular la escultura y participar en su configuración final. Ferrant denominó a este nuevo concepto escultura infinita. Esta exposición presenta 50 obras de posguerra de Ángel Ferrant procedentes principalmente del fondo del Museo de Arte Contemporáneo Gas Natural Fenosa. Muestra al Ferrant más desconocido, que sigue un proceso de progresivo desnudamiento desde el naturalismo de la primera posguerra hasta un nuevo concepto de escultura móvil, abierta y transformable. Ángel Ferrant, biografía Hijo del pintor Alejandro Ferrant, Ángel Ferrant (Madrid, 1890-1961) fue uno de los escultores más importantes de la vanguardia, iniciador de la escultura cinética y surrealista española. Tras estudiar en la Escuela de Artes y Oficios, en la Academia de San Fernando y en el taller del escultor Aniceto Marinas, amplió sus conocimientos en viajes por Europa y en una estancia en París. Tras un breve paso por La Coruña, se traslada a Barcelona en 1920, aunque en 1934 se establece definitivamente en Madrid. En el año 1926 gana el Concurso Nacional de Escultura en Relieve. Expone en varias galerías y con distintos grupos, como Els Evolucionistes, el Círculo Artístico de Sant Lluc, la Asociación de Escultores y Amigos de las Artes Nuevas, donde inicia su tendencia al surrealismo. En 1943 recibe el encargo por parte de los arquitectos Durán de Cottes y López Izquierdo para colaborar con un conjunto escultórico en la fachada del Teatro Albéniz de Madrid, a modo de reinterpretación de la fachada-retablo de la arquitectura barroca hispana. A finales de la década de los años cuarenta del siglo xx, se une como artista clave a la escuela Altamira, fundada por Mathias Goeritz. En 1960 obtiene el Premio Especial de escultura en la XXX Bienal de Venecia. A pesar de su regreso a Madrid y de la convulsión de la Guerra Civil y la inmediata posguerra, Ángel Ferrant fue capaz de mantener vivas sus ideas plásticas hasta su muerte, acaecida en un momento de su producción en que estaba conjugando la abstracción total, el material metálico liviano y la variabilidad formal de su proyecto de escultura infinita.
El Ferrant más desconocido. Un proceso de progresivo desnudamiento desde el naturalismo de la primera posguerra hasta un nuevo concepto de escultura móvil, abierta y transformable. La exposición Ángel Ferrant. Entre el dibujo y la escultura presenta medio centenar de dibujos y esculturas, procedentes en su mayor parte de la Colección de Arte Contemporáneo Gas Natural Fenosa, de uno de los escultores españoles clave del siglo pasado. La muestra pretende resaltar la extraordinaria aportación creativa de Ángel Ferrant (1890-1961) en un montaje que permite un acercamiento directo e íntimo a su universo gráfico y escultórico. Así, la selección propuesta tiene como objetivo realizar un recorrido por los desarrollos más relevantes de la forma llevados a cabo por el artista a partir de cinco aspectos o bloques temáticos con los que Ferrant trabajó a lo largo de su vida: el naturalismo y la tradición de la estatua, el cuestionamiento del canon y la apertura de la escultura, la capacidad interpretativa de las cosas y las formas, la conjunción de los elementos y, por último, la separación de los elementos, de la madera y del hierro.
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