Esa incredulidad que impulso a Tomás1 para que dudara de su maestro, es el verbo que hoy activa Iván Castiblanco con su obra. En objetos cotidianos que datan de principios del siglo XX, él materializa los recuerdos corporales de la infancia en una memoria material, al construir 6 ensambles en los que convergen el dibujo y la escultura.
Con esta muestra de su obra más reciente, Iván cuestiona los gestos, palabras, y actos aprendidos de memoria, al poner en escena sucesos históricos de la fe católica mediante una excavación simbólica que busca construir nuevos relatos.
Como lo dice Luciana Stegagno en un comentario sobre el libro El evangelio según Jesucristo del escritor José Saramago, “Aquí no se niega lo divino, la religiosidad latente en el corazón de cada hombre: lo que se hace es interrogarlo, cuestiónalo, acusarlo”2.
Lo que se pretende con esta exposición es que como públicos remitamos nuestra mente a...esa edad de la infancia en la que a cada momento preguntamos ¿por qué?, y así interroguemos los actos de fe (si los tenemos), bien sea para reafirmarlos o despreciarlos.
Dudemos de las imposiciones, o de aquello que queremos creer muchas veces sin argumentos, hurguemos en eso que percibimos como real en nuestro diario vivir, pongamos en tela de juicio las fuentes de información con las que construimos el conocimiento, que muchas veces seguimos por imitación al ser nuestra manera natural de aprender.
Tatiana Quevedo
Coordinadora de educación
1 Fue uno de los apóstoles de Jesús.
2 Fragmento de Luciana Stegagno Picchio, comentario sobre el libro El evangelio según Jesucristo escrito por José Saramago.1999.Madrid: Alfaguara.
Imágenes de la Exposición
acto de fe
Entrada actualizada el el 16 may de 2015
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