Descripción de la Exposición
Lorena Álvarez trata de detener el tiempo con su pintura. En un momento histórico en el que existe un exceso de información que hace que pasemos de una manera superficial por todo, la artista asturiana, invita a que el espectador lea su obra de una manera pausada. Su obra es el reflejo de experiencias vividas que rezuman vitalidad en su forma, entendiendo esta también como contenedora de lo fatal. Obras cargadas de la energía y frescura del momento en el que fueron creadas, de la fuerza del artista.
El trabajo de Lorena Álvarez es emocionante, básico y sobre todo sincero, producto de un acto de inconsciencia creativa. Representa escenas cotidianas, pequeños fragmentos de la vida diaria que llaman la atención de la artista, tratando de inmortalizar un momento o plasmar una sensación. Obras repletas de color y vida, de animales y personas, bosques y palmeras, paisajes nevados e islas exóticas.
Lorena Álvarez – y según sus propias palabras- no sabe si pinta o dibuja. Es incapaz de copiar un elemento de la realidad y, a la vez, abstraerlo. Carece de cualquier técnica o virtuosismo -asimilados o aceptados como tal por el sistema-: es incapaz de realizar una perspectiva, una sombra o una simple línea recta. No sabe desarrollar un tema, resumir una situación o jerarquizar tamaños. En general, componer en armonía. Precisamente ahí radica la libertad de su trabajo, alejado de cualquier convencionalismo, método, estilo o intención estética. Esa pintura dibujada que atrapa al espectador haciéndole partícipe de las historias costumbristas que representa. Si profundizamos en su trabajo esa apariencia naïve que posee a priori desaparece y, su obra, se vuelve oscura y nos enfrenta con el alma del artista.
Lorena utiliza medios de la pintura y el dibujo -el óleo, el pincel, el lápiz y los rotuladores de brillantina, entre otros- y soportes encontrados que conforman uno de los elementos más representativos de su trabajo: plásticos estampados, cartones, maderas o bolsas de basura.
El trabajo de Lorena Álvarez cumple con una de las funciones fundamentales del arte: la comunicación. Y es que posee grandes dosis de la misma, en un ejercicio de sinceridad donde la artista no tiene temor a mostrar su fragilidad, en un acto de gran valentía.
Exposición. 18 ene de 2011 - 12 mar de 2011 / Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid / Madrid, España
Exposición. 17 dic de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Picasso Málaga / Málaga, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España